El programa nuclear norcoreano no debe usarse como pretexto para intentar cambiar el régimen en Corea del Norte, advirtió hoy el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov.
«El objetivo marcado por el Consejo de Seguridad de la ONU consiste en la desnuclearización de toda la península de Corea y no debe usarse como pretexto para tratar de cambiar el régimen en Corea del Norte», dijo Lavrov al término de una reunión con el secretario general de la Liga Árabe, Ahmed Abul Gheit.
Agregó que esta es la postura común de Rusia y China y adelantó que los dos países presentarán su propuesta para rebajar la tensión en la región al Consejo de Seguridad que se reúne hoy en Nueva York.
La iniciativa -consensuada ayer en Moscú por los presidentes de Rusia, Vladímir Putin, y China, Xi Jinping- prevé la congelación simultánea del programa nuclear y de misiles de Corea del Norte, y las maniobras militares a gran escala de EEUU y Corea del Sur.
La propuesta insta a Pyongyang a cumplir estrictamente las resoluciones del Consejo de Seguridad que prohíben los ensayos de misiles y armas nucleares, y al mismo tiempo pide a EEUU que renuncie a sus planes de desplegar su escudo antimisiles en el sureste de Asia.
El régimen de Kim Jong-un anunció este martes el lanzamiento de su primer misil balístico intercontinental, el Hwasong-14, que alcanzó una altura máxima de 2.802 kilómetros y recorrió 933 kilómetros.
Sin embargo, el Ministerio de Defensa de Rusia rebajó la magnitud del problema, al asegurar que el misil norcoreano no era balístico, sino de alcance medio.
Según Moscú, los parámetros de vuelo del proyectil indican que el misil era de alcance medio: se elevó a una altura de 535 kilómetros, recorrió cerca de 510 kilómetros y cayó en la parte central de mar del Japón
Este asunto será tratado por Putin y el presidente de EEUU, Donald Trump, el 7 de julio en Hamburgo (Alemania), durante la cumbre del G20 (grupo de países desarrollados y emergentes).
Trump, cuya Administración ha insinuado la posibilidad de ataques preventivos contra Corea del Norte, expresó su confianza en que China tome cartas en el asunto y acabe «con ese sinsentido de una vez por todas».
El ensayo norcoreano, el primero desde el pasado 8 junio y el undécimo desde que comenzó el año, se produjo poco después de que Trump recibiera en Washington al nuevo presidente surcoreano, Moon Jae-in.