María del Pilar Pérez conocida como la “Quintrala” se convierte en evangélica tras las rejas

La mujer que se gano el sobrenombre de “Quintrala” por la crueldad de sus crímenes, en la actualidad cumple presidio perpetuo desde el 2008 en el Centro Penitenciario Femenino (CPF) de Santiago.

La mujer que cumple condena como autora intelectual de la muerte de su ex esposo, Francisco Zamorano, la pareja de éste, Héctor Arévalo, y del economista Diego Schmidt-Hebbel, ha tenido una vida apacible en la cárcel y que solo se ha visto interrumpida luego que en agosto de 2015, le llegara compañía a la arquitecta.

Desde entonces no hemos vuelto a saber de la temida ‘Quintrala de Seminario’, pero la mañana de este lunes en el matinal de Chilevisión, aseguraron que ahora la mujer es una devota cristiana que sigue la religión evangélica al interior del recinto penitenciario.

Fue el abogado farandulero, Aldo Duque, quien confirmó la información. “Simplemente había ido a visitar a otras internas y de repente veo pasar a una mujer bajita, encorvada, de lentes y me extrañó. Y yo pregunté ‘¿quién es?’ y la interna me dice ‘Esa es la ‘Quintrala’, es súper buena onda, va todos los días a la iglesia, es bien ‘piola’ ella’, me dijeron».

El leguleyo agregó que no es extraño su caso, pues muchos reos se aferran a la religión como una esperanza de libertad. “Siempre la religión constituye un refugio muy importante porque es el vínculo que tiene el sujeto o la interna, en este caso, de recuperar algún día la libertad. A fin de cuentas la religión es la promesa de libertad eterna, y esa palabra es con lo que más sueña un reo«, indicó.

En tanto, para el diácono Eduardo Durán, de la Catedral Evangélica de Chile, tampoco es sorpresivo, ya que para él todos tiene derecho a cambiar de vida. “Aunque haya cometido los crímenes más perversos tiene una oportunidad para rehabilitarse. Eso, para los que practicamos la fe cristiana evangélica, no es ningún misterio, eso pasa», comentó, agregando que Dios pudo ser su salvación. “Si ella, en todo este tiempo ha visto que su vida no tenía más sentido sin un ser superior que pudiera dirigir su vida y encontró en la fe cristiana el apoyo que necesitaba, entonces tiene todas las posibilidades de rehabilitarse», indicó.