Por orden del alcalde de Providencia, Cristián Labbé, los liceos José Victorino Lastarria y Carmela Carvajal de Prat, que llevan más de tres meses tomados, fueron desalojados a primera hora de la mañana de hoy, miércoles 21 de septiembre. “Es necesario que se reestablezca el imperio del derecho”, justificó el coronel en retiro, quien ya el pasado fin de semana había anunciado que terminaría con las cinco tomas de establecimientos que aún se mantenían en su comuna. Anunció que luego vendrán el Liceo 7 de Niñas y los demás.
“La usurpación de los colegios es injustificable a esta altura”, señaló el edil a Radio Cooperativa, aunque ayer, los voceros de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) y de la Coordinadora Nacional de Estudiantes Secundarios (Cones), ya habían confirmado su disconformidad con que el Gobierno haya aceptado sólo dos de las cuatro condiciones, según ellos, mínimas para avanzar hacia la resolución del conflicto.
Los alumnos del Lastarria, abandonaron el recinto pacíficamente pero aseguraron que se mantendrán movilizados y asistirán a la marcha de mañana -jueves 22 de septiembre- y que no acogerán el llamado de Labbé, quién declaró que los liceos de su comuna deberán volver a clases a más tardar este viernes 23 de septiembre.
El edil sentenció además, que los estudiantes que tengan que repetir el año por haber estado movilizados y por no inscribirse en el plan de recuperación de estudios “Salvemos el Año”, no podrán hacerlo en los liceos de Providencia. Dijo que en su Municipio se recibe a estudiantes de sectores más pobres, “y más del 90% sacan sobre 450 puntos en la PSU. Pero si no les gusta, que vayan a sus comunas. Así es no más”, declaró Labbé.
Paula Romero, presidenta del Centro de Alumnos del Liceo Tajamar de Providencia, otro de los colegios a la espera de ser desalojado por orden del Alcalde de la comuna, dijo que por estatutos, en su establecimiento pueden ser expulsados alumnos “sólo cuando están con extrema condicionalidad o cuando han repetido un curso en tres oportunidades”. Frente al potencial desalojo, la dirigenta informó que opondrán resistencia “hasta que tenga que llegar Fuerzas Especiales de Carabineros, porque a esta altura no nos podemos dar el lujo de bajar los brazos y dejar la responsabilidad del cambio a las siguientes generaciones, como lo hicieron los pingüinos en 2006”.
Desde el Liceo 7 de niñas, también parte de la lista de los cinco colegios cuyas tomas serán depuestas por orden del edil, la vicepresidenta del Centro de Alumnos, Alina González, puntualizó, en concordancia con la portavoz del Liceo Tajamar, que el reglamento de su establecimiento permite al menos un año de repitencia de los alumnos. “No nos pueden quitar las matrículas así como así”, recalcó González.
Labbé confirmó que, luego de los desalojos, se elaborará un catastro para establecer los destrozos y presunta sustracción de “todos los computadores” de los recintos tomados, por lo que iniciará «acciones legales contra los responsables». El militante de la Unión Demócrata Independiente (UDI) insistió en que si no comparten las medidas por él dispuestas pueden irse a estudiar a sus comunas de origen.
Respecto a las acciones legales, el fiscal nacional Sabas Chahuán aclaró a Radio Cooperativa, que las denuncias y antecedentes por los presuntos robos, aún no se han recibido, pero que de hacerse efectivos, “la Fiscalía tiene que proceder, como lo hace en todos los casos, sea cual sea la escasez de recursos que haya».
La determinación de qué se hará con los alumnos que repetirán el año, se decidirá en el Consejo Municipal, presidido por Cristián Labbé, del próximo martes 27 de septiembre, a las 9:30 de la mañana.
Los estudiantes de los colegios desalojados y de los que aún están expectantes ante la llegada de Carabineros, explicaron que aunque los expulsen, se están organizando para lograr una amplia convocatoria para la marcha del día de mañana, 22 de septiembre.
Por Paula Figari Rojas
Foto: Tomada de www.terra.cl
El Ciudadano