La Policía brasileña arrestó hoy a un hombre acusado de incentivar a niños y adolescentes a participar en el polémico juego virtual de la «ballena azul», que está en la mira de las autoridades desde hace dos meses por algunas muertes de menores presuntamente vinculadas a este fenómeno.
La detención se produjo en un municipio en el suburbio de Río de Janeiro en desarrollo de una operación lanzada este martes simultáneamente en 19 ciudades por agentes de la Policía Civil de nueve estados de Brasil, según la secretaría regional de Seguridad Pública fluminense.
Matheus Moura da Silva, de 23 años y detenido en su residencia en Nova Iguaçu, admitió haber inducido por las redes sociales a unos 30 adolescentes y niños a participar en el polémico juego, que en algunos casos induce al suicidio, según la Policía Civil de Río de Janeiro.
Da Silva también es acusado de amenazar de muerte a los participantes que querían desistir del juego.
Similar a un juego de rol, la «ballena azul» propone a los participantes 50 desafíos para cumplir, que incluyen autolesiones y el suicidio como el último de la lista.
Los participantes reciben mensajes en su teléfono o en perfiles de Facebook para unirse a grupos cerrados y poder participar en el juego.
Entre los retos a superar hay algunos simples, como dibujar una ballena en un papel y otros como cortarse los labios, hacerse un agujero en la mano, tatuarse una ballena en el brazo con una lámina o pasar 24 horas sin dormir viendo películas de terror.
Una serie de muertes y lesiones de adolescentes en abril pasado llevó al Ministerio de Justicia a liderar una operación contra el juego en todo Brasil, que desembocó en la operación de este martes, en el que la Policía Civil cumplió 24 órdenes de registro y allanamiento en diferentes ciudades.
Tan sólo en el estado de Río de Janeiro la Policía Civil registró 15 casos de menores que se provocaron lesiones y uno de un adolescente diagnosticado con depresión, al parecer vinculados a la «ballena azul».
Los primeros casos mortales en Brasil por este juego virtual se registraron en marzo pasado en el estado de Paraíba (noreste), donde al menos dos jóvenes fallecieron mientras supuestamente participaban en una de las pruebas del juego.