Ayer Rihanna sorprendió a todos con su vestido rojo, y un pronunciado escote que no dejó a nadie indiferente. Pero en apenas un día todo cambió.
La cantante de 29 años posó una noche más con elegante atuendo ante las cámaras, y en esta ocasión lo hizo con un delicado vestido plateado de satén, donde cambió de estilo: dejó atrás el escote y optó por algo menos abierto en la zona del busto, pero igual de asentador para su figura.
Ahora en las redes se debaten cuán fue el vestido favorito. ¿Qué piensas tú?