¿Es posible que un gran terremoto, o bien un gran tsunami provocado por un movimiento sísmico, ocurra pronto en España? Esa pregunta preocupa hace un tiempo a algunos expertos; aunque parece que no a los suficientes.
Según Elisa Buforn, una de las mayores expertas europeas en geofísica, la región no cuenta con herramientas suficientes para medir el inminente riesgo, ya que la región es particular: los Sistemas de Alerta Sísmica Temprana (SAST) desarrollados en otras regiones, como California, no son empaquetables y exportables: tierra adentro, cada región del mundo tiene sus peculiaridades, de modo que «lo que pasa en California, no sirve para lo que pasa en España», según la experta.
Además, según Buforn, el problema principal es que la Península Ibérica es una región que ha tenido grandes sismos en el pasado (como el terremoto de Lisboa en 1755, que dejó miles de muertos y provocó un tsunami, o el gran terremoto de Granada en 1884), pero que, como han sido espaciados en el tiempo y el siglo XX ha sido tranquilo, no han sido suficientes para que las autoridades tomen medidas de precaución.
«Nuestra instrumentación actual no sirve para anticipar sismos», explica la experta. Por otra parte, un sismo podría traer, como consecuencia, un tsunami, y otros expertos también se han explayado específicamente al respecto.
El riesgo de tsunami también afecta principalmente a la región de Andalucía. La denunciaaparece en un documental del onubense Fernando Arroyo titulado «La gran ola», y expertos la confirman. Según ellos, es igual de probable que el tsunami llegue en 300 años, como que llegue hoy mismo.
«Se han repetido (los tsunamis) y se repetirán porque conozco la máxima geológica de que cada vez que hay un desastre, volverá a suceder. Y eso no lo podemos olvidar», señala María Eugenia Petit, profesora de Historia y experta en catástrofes históricas. Como otros científicos, se asombra de que los políticos miren hacia otro lado: «Que no se tomen medidas forma parte de la negligencia, el miedo o la incompetencia», sostiene Francisco Javier Gracia.
Cómo actuar en caso de catástrofe
María Belón, una madre cuya familia sobrevivió por milagro al tsunami de Tailandia en 2004, explica que lo que no se está haciendo, y que podría salvar miles de vidas, es informar e instruir a la población: que se informe a la población de Huelva y Cádiz, dos provincias sin apenas protecciones naturales, y se le enseñe cómo actuar en caso de catástrofe, como hacen los japoneses.
Según indica el periódico Ideal, Nociones básicas como conocer las vías de evacuación, no intentar huir en coche (colapsarían las carreteras), no acudir en busca de los hijos sino tener establecido con ellos un punto de encuentro posterior, y buscar rápidamente un lugar elevado donde ponerse a salvo, «Es una información que les podría salvar la vida», como recuerda María Belón.
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