Una de las infracciones más frecuentes a la hora de conducir vehículos es la que cursan por exceso de velocidad. La multa por esta falta puede llegar a ser muy costosa, dependiendo de cuántos kilómetros se sobrepase la máxima permitida.
Además, muchas veces estas infracciones están estrechamente vinculadas con manejar bajo la influencia del alcohol, no obstante, no siempre es así y hay veces en que los conductores necesitan llegar pronto a su destino. Este fue el caso de un hombre australiano que fue multado luego de manejar en una calle cuyo límite de velocidad era de 60 km/hora, pero él iba a 97 km/hora.
De acuerdo al medio Huffington Post, el incidente tuvo lugar el 25 de septiembre, cuando este hombre fue detenido por un oficial de la Policía de Dalwallinu, al este de Australia, ya que manejaba a exceso de velocidad. Para poder evitar la multa, este sujeto se sinceró con el oficial y le explicó la incómoda razón por la cual iba manejando tan rápido.
«Necesitaba cagar, los niños me contagiaron diarrea», confesó el australiano imaginando que así el policía se compadecería de su situación y, por ende, podría evadir la multa. Sin embargo, el oficial hizo caso omiso de su declaración y siguió con el proceso, incluso anotó la excusa de este hombre como dato en el informe, el que fue compartido por las redes sociales de la policía.
Finalmente, este hombre tuvo que pagar cerca de 1000 euros (más de 700 mil pesos chilenos) por la infracción, ya que además no tenía licencia de conducir, puesto que la había perdido.
¿Qué te parece la actitud de la policía y de este hombre?