Científicos de la UdeC realizan estudio marino con modernos vehículos no tripulados

Mediante vehículos submarinos, únicos en Sudamérica, y conocidos como “Gliders”, científicos de la Universidad de Concepción (UdeC) estudian las aguas interiores de Chiloé, zona de gran importancia en acuicultura para Chile

Científicos de la UdeC realizan estudio marino con modernos vehículos no tripulados

Autor: Cesarius

Mediante vehículos submarinos, únicos en Sudamérica, y conocidos como “Gliders”, científicos de la Universidad de Concepción (UdeC) estudian las aguas interiores de Chiloé, zona de gran importancia en acuicultura para Chile.

Al sur de la Isla grande de Chiloé, el agua de mar que baña gran parte de la región, ingresa por la boca de Guafo y el Golfo de Corcovado, zonas que componen el mar interior de esa región (Golfos de Corcovado y Ancud, y Seno de Reloncaví).

Esta región es usada extensivamente para la acuicultura y la calidad de sus aguas depende, en gran parte, de las características del agua de mar que ingresa a estas cuencas. Se definen por el contenido de oxígeno disuelto, la temperatura y la densidad de las aguas. Con estos datos, los científicos pueden establecer la calidad y la característica de las aguas.

Para estudiar estas recónditas aguas, los científicos ya no deben realizar tediosas y costosas campañas, donde muchas veces ponen en peligro su integridad sólo para tomar muestras del agua, ni deben pasar semanas e incluso meses embarcados. Todo esto ha cambiado gracias a unos nuevos vehículos no tripulados y de última generación, adquiridos por la Universidad de Concepción (UdeC), y cuyo proyecto es liderado por el doctor Oscar Pizarro, del Departamento de Geofísica de esa casa de estudios.

Los “Gliders” o “Planeadores submarinos” han revolucionado la oceanografía física, ya que a través de ellos es posible obtener perfiles de muy alta resolución de diferentes variables oceanográficas. Estos vehículos son verdaderos planeadores submarinos controlados remotamente vía satélite, y pueden pasar meses navegando de forma autónoma, para que finalmente los científicos y técnicos los recojan de las aguas, y descarguen los datos obtenidos por el instrumento.

Para este estudio, el planeador fue desplegado recientemente frente a la Isla San Pedro y permaneció navegando por diez días entre el continente y la Isla Grande de Chiloé.

“Toda la información recolectada servirá para evaluar la calidad de las aguas que entran al mar interior de Chiloé y una vez procesada, quedará a libre disposición para otros científicos o para las empresas acuícolas y consultoras ambientales interesadas en la región”, menciona el doctor Pizarro, quien destacó la importancia de los estudios ambientales para el uso adecuado y sustentable del océano costero en una de las regiones más hermosas del país.

Nadín Ramírez, oceanógrafo a cargo de la operación, añade que el equipo humano realizó además otras mediciones oceanográficas a bordo de una embarcación local. Para ello, la oceanógrafa Úrsula Cifuentes, se dedicó a instalar un conjunto de sensores oceanográficos, que ayudaron a medir las corrientes marinas, temperatura y salinidad en medio del golfo del Corcovado.

Este ambicioso estudio es parte de dos importantes programas de investigación del mar austral de Chile: el Programa Cimar Fiordos del Comité Oceanográfico Nacional y el Programa Copas Sur-Austral, de la Universidad de Concepción.

En el marco de este último Programa se desarrollaron recientemente mediciones con planeadores marinos en el Estrecho de Magallanes, a cargo del mismo equipo de la Universidad de Concepción.

El Ciudadano


Reels

Ver Más »
Busca en El Ciudadano