Se supone que un profesor debería ser un ejemplo de conducta para todos los alumnos que lo ven como una figura de autoridad. Normalmente existe un respeto entre ambas partes, pero ¿qué pasa cuando es el profesor el que lleva a los alumnos por el camino equivocado?
Por acosar a estudiantes, obligar a sus alumnos a invitarlo a bares y pagar sus cuentas y mantener una relación con una alumna, una universidad privada del estado de Tlaxcala, en el centro del país, cesó a un maestro y abrió una investigación en su contra.
El hombre, de 27 años, está identificado como Hosciel L. y, según las autoridades escolares, tiene antecedentes de robo en otra universidad del estado.
Esto ocurrió en la Universidad del Desarrollo, donde el área de Recursos Humanos recibió denuncias en contra de este profesor de ingeniería automotriz, por amenazar a sus alumnos con reprobarlos si no le presentaban a sus compañeras de clase, a quienes hostigaba en bares y fiestas organizadas en su casa.
El director de la institución, José Balderas Frías, declaró a un periódico local que el docente había sido contratado recientemente y que éste aceptó su conducta y haber mantenido «una relación con una alumna».
Hosciel L. también forzaba a los estudiantes a pagar sus cuentas en bares, por lo que el pasado viernes 20 de octubre fue removido de su cargo.
De acuerdo con la investigación llevada a cabo por la institución educativa, el profesor de ingeniería tiene un precedente de hurto en otra universidad de Tlaxcala, cuyo nombre no se dio a conocer.