Un misterioso objeto, que fue detectado al pasar por nuestro Sol, podría ser la primera roca espacial proveniente de un sistema solar diferente, de acuerdo con los astrónomos que rastrean el cuerpo.
Se ha pensado que otros objetos han tenido un origen interestelar, pero esta vez los expertos dicen que el último hallazgo, un objeto que se estima en menos de 400 metros de diámetro, es el candidato más probable hasta ahora.
«Lo emocionante de esto es que puede ser esencialmente un visitante de otro sistema estelar», dijo el Dr. Edward Bloomer, astrónomo del Observatorio Real de Greenwich, citado en The Guardian.
Si se confirma que sus orígenes están más allá de nuestro sistema solar, será la primera roca espacial que con seguridad proviene de otros lugares de la galaxia.
Publicado en las circulares electrónicas de planetas menores por el Centro de Planetas Menores del Centro de Astrofísica Harvard-Smithsonian, las observaciones revelan que el objeto está en una fuerte órbita hiperbólica; es decir, está yendo lo suficientemente rápido como para escapar de la atracción gravitatoria del Sol.
Los objetos que se originan desde y en órbitas de largo período en nuestro sistema solar, pueden terminar en una trayectoria hiperbólica y ser eyectados al espacio interestelar (por ejemplo si se pasean cerca de un planeta gigante, ya que la gravedad del planeta puede aumentar la aceleración de objetos). Pero el Dr. Gareth Williams, director asociado del Centro de Planetas Menores, dijo que ese no era el caso del cuerpo recién descubierto.
«Cuando ejecutamos la órbita de este [objeto] en el tiempo, se mantiene hiperbólico a lo largo de todo el camino, no hay acercamientos estrechos a ninguno de los planetas gigantes que podrían haberlo expulsado», dijo Williams. «Si seguimos la órbita en el futuro, se mantiene hiperbólica. Así que viene del espacio interestelar y va al espacio interestelar», agregó.
«Si más observaciones confirman la naturaleza inusual de esta órbita, este objeto puede ser el primer caso claro de un cometa interestelar», señala el informe. Un segundo informe, publicado más tarde el mismo día, hizo un nuevo análisis de la apariencia del objeto y lo identificó como un asteroide, llamándolo A/2017 U1.
Según las observaciones hechas por los astrónomos, el objeto ingresó a nuestro sistema solar desde arriba, pasando justo dentro de la órbita de Mercurio y viajando debajo del sol, para luego girar y volver arriba, a través del plano del sistema solar hacia las estrellas más lejanas. En su punto más cercano, el 9 de septiembre, el objeto estaba a más de 37 millones de kilómetros del sol.
Ahora los astrónomos de todo el mundo siguen el camino del objeto, que fue descubierto por primera vez a principios de este mes por un observatorio de Hawai.
Fuente, The Guardian, IFLS
Imagen redes: el objeto aparece (con falso color) como un débil punto de luz en el centro. Las rayas son estrellas, causadas por el telescopio que rastrea el objeto. Fotografía: Alan Fitzsimmons / Queen’s University Belfast / Grupo Isaac Newton La Palma
El Ciudadano