Hace poco un equipo de arqueólogos informó que una tableta asiria de 4.000 años de antigüedad probablemente era un contrato de matrimonio. Esta no es la única tableta de arcilla de este tipo; hay decenas de miles más.
Como se revela ahora en un nuevo artículo, una minuciosa traducción de muchas de estas tabletas reveló las ubicaciones de antiguas metrópolis que han estado desaparecidas por muchos siglos.
El profesor de asiriología de la Universidad de Harvard, Gojko Barjamovic, quien trabaja junto a un equipo internacional de investigadores y economistas, afirma que el estudio tiene el potencial de cambiar la forma en que se entiende el Imperio asirio.
Estas tabletas fueron extraídas de una excavación en la antigua ciudad de Kanesh, en la actual Turquía. Están escritas en tipos cuneiformes, desarrollados por los sumerios de Mesopotamia, y son una mezcla de transacciones comerciales, cuentas, sellos, contratos e incluso certificados de matrimonio.
Las tabletas pueden parecer poco interesantes para el común de las personas, pero para los aficionados y expertos son reveladoras. Los contratos comerciales siempre mencionan los lugares en que realizan las transacciones y a veces los destinos de los productos comercializados. Esto significa que se podría seguir la pista de ubicaciones y ciudades que aún no se han encontrado y que están enterradas bajo el suelo turco.
Después de analizar 12.000 tabletas de arcilla, el equipo cree que ha identificado 26 ubicaciones, de las cuales ya se ha encontrado 15. No están las coordenadas precisas, pero gracias a un antiguo método de comercio, el equipo cree que puede descifrar la mayor parte de ellas.
Kanesh alguna vez fue un pequeño asentamiento que se convirtió en un importante puesto comercial para toda la región. Las tabletas son tan detalladas que en su artículo los autores describen la ciudad como una «economía de mercado floreciente, basada en la libre empresa y la iniciativa privada, comerciantes lucrativos y arriesgados, respaldados por complicados contratos financieros y un sistema judicial que funciona bien».
Este registro exhaustivo de cuentas reveló que Kanesh comerciaba más con las ciudades cercanas que con las lejanas. Tomando todos estos datos y cuantificándolos adecuadamente, el equipo logró crear un sistema de distancia basado en la frecuencia del comercio entre ciudades, al que llaman «modelo de gravedad estructural». Este proporciona estimaciones sólidas sobre dónde podrían estar estas ciudades perdidas. Sus aproximaciones «se acercan notablemente a las conjeturas cualitativas producidas por los historiadores», señalan los investigadores.
Para poder confirmar la precisión de su sistema, las ciudades deben ser halladas, pero este documento ofrece una útil herramienta para los arqueólogos y es una puerta de entrada a un reino que fue la primera superpotencia del mundo.
Por IFLScience