Los avispones pueden alcanzar una longitud de 5,5 centímetros y, a diferencia de las abejas, picar más de una vez
Las avispas no son un juego de niños. Y si no que se lo pregunten a Jude Berret, un estadounidense cuya ocupación profesional es la exterminación de insectos, las avispas entre ellos.
El hombre, oriundo de Patterson, ha grabado y ha subido a su canal de Youtube -llamado Stinger Creations- su última hazaña, en la que muestra cómo logró acabar con un nido de dimensiones descomunales, que él mismo ha bautizado como «el abuelo de los avispones».
Desahuciar a los insectos de su meganido del tamaño de un refrigerador le llevó unos 45 minutos. «No me picaron ni una sola vez», comentó Verret tras completar el trabajo en la ciudad de Patterson (Luisiana).
El nido estaba formado por avispones que son comunes en Asia, Europa y Estados Unidos y que al sentirse en peligro pican dejando veneno en su atacante. Aunque siempre y cuando no se sea alérgico, una picadura no pone en riesgo la salud, una gran dosis de veneno sí lo hace.
Miles de usuarios de las redes sociales han resaltado la heroica labor de trabajador sobre todo por exponerse ante un enjambre potencialmente mortal de las criaturas.
Para que se haga una idea del dolor que puede causar la picadura de estos insectos hay que tener en cuenta que los avispones más grandes alcanzan 5,5 centímetros de longitud y que, a diferencia de las abejas, pueden picar varias veces.
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