Corea del Norte y su despliegue armamentístico tiene la ‘estabilidad mundial’ pendiendo de un hilo. Y es que con el desarrollo de su nuevo misil balístico intercontinental la comunidad internacional ya se está preparando para cualquier eventualidad. De hecho, en Hawaii ya están haciendo ensayos de ataques nucleares, haciendo sonar sus sirenas de guerra y ensayando evacuaciones.
Sin embargo, hay un aspecto de la carrera armamentística de norcorea que hasta hoy no era conocida por el mundo. Y es que miles de soldados de Corea del Norte están desertando a su hermana sureña debido a una insólita arma surcoreana.
Se trata de simples, pero hartos altavoces de altos decibeles que obligan a los soldados de la corea comunista a escuchar música pop y, al parecer, está teniendo un efecto devastador en las filas marciales de Kim Yong-Un.
Se trata básicamente de propaganda política a tavés de música pop que describe las ‘maravillas’ de la vida capitalista de la corea sureña. Estos potentes equipos de sonido están instalados en la zona desmilitarizada entre ambos países y transmiten la música pop que está volviendo locos a los soldados de Corea del Norte.
Desde esa nación están constantemente reclamando por la medida tomada por Corea del Sur, ya que la consideran como una ofensiva de presión psicológica en contra de sus fuerzas armadas.
Según la agencia Reuters más de 1.000 norcoreanos desertan cada año de Pionyang, pero normalmente lo hacen pasando por el sur de China, y muy rara vez lo hace directamente por la línea divisoria entre ambas coreas.