La consolidación de la industrialización del litio en Bolivia, que ya ha superado las etapas iniciales, marcará la transformación de la estructura económica del país, afirmó el vicepresidente altiplánico, Álvaro García Linera.
La Agencia Boliviana de Información menciona este domingo algunos aspectos de una extensa entrevista del diario “La Razón”, en la que García Linera abordó varios temas, evaluó la gestión que concluye, y se refirió a las proyecciones para que Bolivia se mantenga en el primer lugar de los países de la región en crecimiento económico.
“Uno de los grandes sueños es el litio”, respondió a la pregunta de cuáles son los proyectos más grandes para el próximo año y afirmó que el litio “va a modificar la composición y la estructura económica del país, porque se inserta en una cadena mundial en ascenso y la inserción es desde la materia prima”.
El vicepresidente aseveró que en torno al litio hay cuatro industrias colaterales y anunció que las siguientes semanas serán decisivas para “completar el último eslabón que es el mercado de las baterías”. Además, dijo que hay otros elementos respecto a la diversificación industrial que encarará el Gobierno, entre ellas, fábricas de cemento, de urea, derivados de gas en Tarija, que es otra base industrial.
Asimismo, puntualizó que el tren bioceánico que propuso Bolivia y que ha sido respaldado por Perú, Brasil, y otros países de la región, además de las muestras de interés de varios países europeos y de Asia”, será una realidad y se convertirá en una “especie de Canal de Panamá férreo por la cantidad de mercancía que trasladará”.
“2018 y principios de 2019 van a estar marcados por estas tres grandes decisiones, grandes proyectos que los hemos venido trabajando años atrás y que comenzarán a mostrar su primeras resultados”, concluyó García Linera.
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