Este año ha sido dulce y agraz para la vida silvestre y sus defensores. Por un lado, los leopardos de las nieves y los kiwis salieron de la lista ‘en peligro’ y se ha redescubierto algunas especies que se daban por extintas.
Pero por otro lado, parece ser el final del camino para los guepardos asiáticos, las vaquitas marinas y las ballenas francas del norte. Lamentablemente, parece que el delfín de África occidental también parece estar en este grupo, porque acaba de ser clasificados como uno de los mamíferos más raros de África.
El poco conocido delfín jorobado del Atlántico (Sousa teuszii), que mide alrededor de 2,5 metros, solo vive a lo largo de la costa de África Occidental, desde el Sáhara Occidental hasta Angola Central. Debido a que es muy tímido, rara vez se aventura lejos de la costa. Desafortunadamente, esto los pone en peligro directo por las actividades humanas, desde enredarse en la red de pesca hasta ser golpeados por barcos, pasando por la proliferación de ciudades costeras y la caza en busca de alimento.
La última evaluación de la Wildlife Conservation Society (WCS) y el Grupo de Especialistas en Cetáceos de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), movió al delfín de «vulnerable» a «en peligro crítico» en la Lista Roja de Especies Amenazadas de la UICN.
«Nuestra evaluación reciente sugiere que la población mundial del delfín jorobado del Atlántico probablemente tenga menos de 1.500 adultos reproductores, distribuidos entre varias subpoblaciones aisladas, la mayoría de las cuales parecen ser muy pequeñas», dijo Tim Collins, del Programa de Gigantes Marinos de WCS y Coordinador de África del Grupo de Especialistas en Cetáceos de la UICN.
Esta actualización le otorga el dudoso honor de unirse a la lista de los mamíferos más amenazados de África, junto con rinocerontes negros, gorilas, jirafas de Rothchild y perros salvajes africanos.
Para la nueva evaluación, los investigadores estudiaron las poblaciones a lo largo de los 7.000 kilómetros que se consideran ser su rango de habilabilidad. Descubrieron que la mayoría de las poblaciones eran pequeñas, aisladas y con números mucho más bajos de lo que se pensaba. Encontraron una disminución en todos los grupos conocidos y pronostican que una disminución continua es inevitable, dado el aumento de las amenazas, incluida la creciente competencia para la pesca y el aumento de la población humana en su rango.
Los investigadores esperan que el nuevo estado «en peligro crítico» ayude a llamar la atención de las personas, al igual que con el gorila icónico o el rinoceronte negro, y que las estrategias proactivas, como la introducción de áreas marinas protegidas especializadas, eviten que sigan el camino de sus hermanos condenados.
El Ciudadano, vía IFLScience