Las polémicas declaraciones que dio el Papa en su visita a Chile en defensa del Obispo Juan Barros, asegurando que no había pruebas en su contra, no han caído en saco roto y sus repercusiones se han dejado ver también en Perú.
“El día que me traigan una prueba voy a hablar. No hay una sola prueba en su contra, todo es calumnia”, aseguró el líder católico en declaraciones al medio Radio Bío Bío.
Pues bien, apenas llegar a Perú un gigantesco cartel colgado en Lima frente a la Iglesia de Las Nazarenas lo esperaba: «Francisco, aquí si hay pruebas», rezaba la pancarta, en la que también se podía ver la foto del papa junto a la de Luis Fernando Figari, laico fundador del Sodalicio de Vida Cristiana, movimiento católico acusado de cometer abusos sexuales contra niños.
De acuerdo a lo informado por el medio Perú 21, Figari todavía no habría sido condenado por la justicia, pero el Vaticano si ha ratificado los delitos de abusos, de igual manera que lo ocurrido con Karadima en Chile.
Pero esta no es la única protesta contra Figari que se ha tomado las calles peruanas. Unos días atrás su imagen con un traje de presidario fue proyectada en un edificio junto a las frases «despedofilízate» y «Yo sí te espero».
Polémica participación del «Juan Barros peruano»
En tanto, el arzobispo de Tumbes y Piura, José Antonio Eguren, acusado de encubrir abusos sexuales como miembro de la cúpula fundada por Figari, participó este sábado en el encuentro que mantuvo en Trujillo el papa Francisco.
Eguren entregó ayer sus saludos al papa Francisco donde expuso su obedencia y disponibilidad para la vida sacerdotal, en medio de las críticas de muchos sectores de la sociedad por su presencia.