En el año 2007, se supo que una niña, de nombre Madeleine McCann, había sido secuestrada desde un resort en Praia da Luz, en Portugal. El caso de esta menor ha conmocionado al mundo, pues, hasta el día de hoy, no se sabe qué pasó con ella.
Su caso ha movilizado a miles de personas y ha llevado a la Policía Metropolitana de Londres a elaborar diferentes estrategias para dar con su paradero.
Pero hace poco se supo sobre un insólito plan que generó el rechazo de varias personas.
La estrategia fue elaborada por el detective privado, Kevin Halligen, quien hace unos días fue encontrado muerto, por lo que tras su deceso salieron a la luz algunas aristas de su actuar, según consignó el medio The Sun.
Resulta que este hombre, un año después de la desaparición de Madeleine, elaboró un plan por el que le cobró a los padres de la niña cerca de 300 mil libras esterlinas, es decir, algo así como 250 millones de pesos chilenos.
El experto en seguridad, Richard Parton, reveló algunos detalles del escabroso plan de Halligen en el documental «The Conman And the McCanns».
Según Parton, el detective privado habría contratado a una pareja y a una niña de características físicas parecidas a los McCann y los llevó al balneario Praia da Luz para de esta forma ‘tentar’ al supuesto secuestrador.
«Él consiguió una pareja para irse de vacaciones con un niña que se parece mucho a Madeleine y aparentemente fue utilizada como cebo», confesó Parton, y agregó que cuando se enteraron del plan quedaron “horrorizados”.
Además de no conseguir nada con esto, Halligen terminó estafando a los padres de la pequeña por esta enorme cantidad de dinero.
Cabe señalar que lo último que se supo de Madeleine McCann, es que aquella noche de la desaparición, una mujer de nombre Louisa Todorov, que actualmente vive en Bulgaria, estuvo allí. Ella estuvo parada afuera del departamento donde se hospedaba la familia a eso de las 20:00 horas, y media hora después, fue vista allí mismo por otra persona.
En tanto, su esposo, Stefan Todorov, estaba trabajando en el bar donde estaban los padres de la niña cenando, por lo que, hasta ahora, son los principales sospechosos.