Donald Trump no cesa de generar polémica con sus propuestas. La última, la advertencia de que en EE.UU. podría aplicarse la pena de muerte para los grandes traficantes de opiáceos.
El anuncio fue hecho por el presidente estadounidense este lunes, coincidiendo con el anuncio de una nueva estrategia para combatir la crisis de dichas sustancias que se basará en reducir la demanda y respaldar el tratamiento de rehabilitación para los adictos.
Trump remarcó que su propuesta va dirigida a «aquellos que matan a miles de personas, que ni siquiera van a la cárcel cuando son apresados» y aseguró que «Si infringe la ley y vende ilegalmente estos venenos mortales, lo encontraremos, lo arrestaremos y lo haremos responsable».
Las polémicas declaraciones fueron hechas en Manchester, capital del estado de New Hampshire, donde el actual presidente estuvo acompañado de Melania Trump, quien le precedió en las intervenciones y aseguró que reforzará la campaña anti-droga desde la Casa Blanca.
Trump aseguró que, en el marco de la campaña, se destinará una partida de fondos federales para financiar anuncios televisivos que ayuden a luchar contra el problema y alejen a los más pequeños del mundo de la drogadicción: «Es la mejor forma de prevenir y reducir la tragedia en el futuro», señaló.
Además del endurecimiento de penas y la utilización de los medios como vía de prevención, Trump señaló que ha previsto invertir en la mejora de dispositivos tecnológicos que permitirán el refuerzo de los medios al alcance de la policía en los lugares más susceptibles de convertirse en punto de entrada de la droga al país. Asimismo, dicha tecnología será usada para mejoras las terapias para los adictos y en la gestión de los opiáceos para hacer frente al dolor.
Cabe recordar que la gran crisis de los opiáceos en el país comenzó en la década de los 90 cuando, tras el anuncio por parte de las farmacéuticas de que se trataba de sustancias no adictivas, aumentó su consumo de forma desmesurada.
Actualmente, la sobredosis por opiáceos es la causa de muerte violenta más común en EE.UU, por encima de los accidentes de tránsito o por uso de armas de fuego, consigna el portal Telemundo.