Al menos 17 personas fueron asesinadas por fuerzas israelíes en la frontera con Gaza tras un bombardeo registrado el pasado viernes 30 de marzo en la llamada “Marcha del Retorno”, una de las incontables acciones que han emprendido los ciudadanos palestinos en protesta por el desplazamiento que han sufrido desde el inicio del conflicto por parte del gobierno israelí.
Alrededor de 30 mil palestinos, entre ellos mujeres y niños, se reunieron el pasado viernes en una manifestación pacífica a lo largo de la valla de 64 kilómetros que separa el Gaza del resto del país, reclamando que a los refugiados y a sus descendientes se les prohibió el derecho a retornar a su territorio. Para el viernes sólo se había registrado 15 muertos y más de 1.400 heridos, pero para este lunes dos víctimas se sumaron a la tragedia.
El pueblo palestino y también de Turquía acusaron a Israel de hacer «uso desproporcionado» de la fuerza para reprimir la manifestación. El ejército Israelí atacó con tanques, aviones, francotiradores y hasta empleó uso de “drones” en tres posiciones del movimiento islamista Hamas, en Gaza, luego de asegurar que los manifestantes dispararon contra sus soldados en la frontera para justificar la masacre.
Los gazatíes instalaron campamentos cerca de la valla fronteriza con el propósito de denunciar el bloqueo impuesto desde hace diez años por parte del Estado hebreo y el cierre permanente del paso hacia Egipto.
El movimiento promueve el “derecho al retorno” de cientos de miles de palestinos quienes fueron expulsados de sus tierras y de quienes se vieron forzados a huir luego de la guerra que siguió la creación del Estado de Israel en 1948.
A partir del año 2008, Israel y Hamas han estado envueltos en al menos tres guerras como consecuencia de la disputa por el territorio ocupado por Israel a la fuerza, y a partir de 2014 se encuentran en un tenso alto al fuego, sin resolución cercana de la disputa.