Un informe del Servicio de Investigación del Congreso, publicado el pasado mes de febrero por la Federación de Científicos Americanos (FAS, por sus siglas en inglés), reveló que Estados Unidos ha otorgado más de 134 mil millones de dólares en ayuda militar, económica y en materia de conflicto a Israel.
De acuerdo con los datos aportados por el estudio, el 14 de septiembre del año 2016 ambas naciones firmaron un nuevo acuerdo belicista, a través del cual la Casa Blanca se encargó de otorgar una ayuda militar a Israel por el orden de 38 mil millones durante el 2019-2028, que cuenta además con el aval del presidente Donald Trump.
Esta cooperación trasciende en el ámbito científico, de energía, cibernético, que no aparecen en los datos tomados del Departamento norteamericano de Estado y por la Federación de Científicos Americanos (FAS, por sus siglas en inglés).
En marzo pasado, el ministro de asuntos militares de Israel, Avigdor Lieberman, se mostró emocionado y complacido al informar que el Congreso de Estados Unidos aprobó “una suma récord para el programa de defensa de misiles de Israel: ¡705 millones de dólares en 2018!”.
Los recursos que aporta el país del norte de América estarían destinados al desarrollo de un sistema antimisiles Cúpula de Hierro (Iron Dome, en inglés), para ayudar a “defender” al régimen de Tel Aviv de posibles ataques por vía aérea.
Para el año 2019, Israel ha solicitado al Congreso estadounidense $3.300.000 solo para gastos de orden militar, mientras que en el área económica otros 500 millones de dólares. En detalle, del año 1946 al 2016 para la inversión militar fueron destinados $91.617.786, en 2017 $3.175.000. Para el área económica solo $34.265.675 durante el mismo periodo.
Desde la época post guerra Israel ha recibido también desde Estados Unidos $5.104.874 y otros $600.735 en 2017 solo para el desarrollo de un sistema antimisiles.
Israel figura de esta manera como el mayor receptor de asistencia estadounidense acumulada desde la Segunda Guerra Mundial, desde cuando la nación árabe, según los expertos, ha bombardeado, invadido y ocupado más países en Medio Oriente y África que el poder colonial anterior, excepto los EE. UU. La lista de víctimas de Israel incluye: Palestina, Siria, Líbano, Egipto, Iraq, Jordania, Sudán y Yemen.
Medios también señalan que Israel mantiene enormes reservas de armas nucleares, químicas y biológicas que rechazan cualquier acceso a los inspectores de armas internacionales y no está obligado a cumplir con el tratado de no proliferación, debido a la intervención diplomática de Estados Unidos.