Primer Quinquenio del Transantiago (Parte I)

El Transantiago ha demostrado ser un sistema de transporte de pasajeros de alta complejidad que se diseñó y se puso en marcha con el empleo de capacidades insuficientes para cumplir sus promisorios objetivos

Primer Quinquenio del Transantiago (Parte I)

Autor: Esteban

El Transantiago ha demostrado ser un sistema de transporte de pasajeros de alta complejidad que se diseñó y se puso en marcha con el empleo de capacidades insuficientes para cumplir sus promisorios objetivos. Se impuso a la población, con escasas pruebas de funcionamiento y de simulación de los multipropósitos que se combinaban, constituyéndose en uno de los mayores cambios sociales de la República.

Si, por ejemplo, se hubieran empleado técnicas de management, como el Project management (PM), escenarios sociales y de respuestas culturales, señales débiles, métodos de simulación, sistemas expertos de evaluación estratégica y otros, se hubiera obtenido la información y experiencia disponible de los expertos en aquellas áreas oscuras o desconocidas. Se habría evitado poner en marcha un sistema con dificultades de recaudación, transbordos complejos, tiempos de traslado desconocidos, mucha inseguridad e incertidumbre y tensiones innecesarias en la sociedad. Se hubiese podido contar con sistemas de información iniciales suficientes y con sus costos, y fijar tarifas adecuadas al ingreso del pasajero común y sin necesidad de ser subvencionadas, y compensar políticamente a otras regiones.

Generalmente, cuando no se emplea en forma adecuada el arsenal de medios de management, como el PM para la administración integral de un proyecto, se olvidan muchas actividades principales, hitos críticos y conjuntos de actividades de diferente tipo, faltando mediciones previas y pruebas de funcionamiento, riesgos, etcétera. Todo lo cual ayuda a estimar un presupuesto para el proyecto total y para su funcionamiento inicial y en régimen, que representa sólo una parte de los costos reales. Mas como finalmente es imposible que el sistema Transantiago funcione se ha procedido a introducir cambios marginales y a incurrir en mayores costos, generalmente impensados. Al final, el proceso es más gravoso y con altas probabilidades de que sus costos sigan aumentando en el afán de mejorar aspectos parciales del sistema, pero que no resuelven el problema fundamental de diseño original.

A esta altura del desarrollo es indispensable pensar en: ¿Cómo debe ser la continuidad del sistema de transporte urbano y cuáles serán las grandes decisiones y alternativas posibles de solución? Su respuesta es tema para una próxima nota. En todo caso, los mecanismos de respuesta que se han estado aplicando en los años de funcionamiento han llevado a más costos y mayores tarifas siempre, un parque que a simple vista se está deteriorando rápidamente, y para los usuarios se les presenta como un medio que seguirá aumentando de precio sin límite. Cada hora que pasa se sigue hipotecando recursos enormes y crecientes y se entrega una calidad de servicio que no es acorde con los subsidios en Santiago y sus compensaciones políticas a regiones.

Primer Quinquenio del Transantiago, un servicio faraónico que no se condice con las tarifas que se cobra a quienes las pagan (sin evadir) y con las que pagan indirectamente todos los que lo subsidian día a día con sus impuestos. La evasión como muestran los estudios y la simple inspección como usuario no tiene solución sin hacer cambios de fondo a un sistema que no funcionó. Seguimos esperando hace 5 años una decisión.

 

Por Omar Villanueva Olmedo

Director OLIBAR Consultores

-desde 1972 en Chile-


Reels

Ver Más »
Busca en El Ciudadano