Muchas personas después de comer se sienten hinchadas y pesadas, haciendo que su día se torne muy incómodo.
Esta condición puede deberse a distintos factores como comer demasiada cantidad, comer muy rápido, consumir alimentos altos en grasas, sufrir de enfermedades como el colon irritable, alergias alimentarias u otras que, con la visita al médico, pueden ser aclaradas.
Terminar hinchado después de cada comida es molesto y nos genera problemas digestivos que pueden ocasionar daños a largo plazo.
Es por eso que si ya no quieres sufrir más, puedes probar este truco casero en el que no necesitarás más de dos ingredientes: agua y medio limón.
Los beneficios que entrega el jugo de limón son muchos, entre los cuales destaca que evita la mala fermentación de los alimentos. Este jugo contiene una alta cantidad de ácido cítrico, el cual neutraliza el exceso de acidez en el estómago, pues a pesar de ser de composición ácida, cuando entra al cuerpo se metaboliza transformándose en sales alcalinas.
Además de lo anterior, estimula el flujo de la saliva y de los jugos gástricos, lo que ayuda a la digestión; estimula las secreciones biliares, contribuyendo a metabolizar mejor las grasas; y neutraliza las toxinas, ayudando a eliminarlas del cuerpo.
Para que este jugo haga efecto debes exprimir medio limón en agua y beberlo ojalá media hora antes de cada comida. De esta forma evitarás síntomas tan molestos como la hinchazón abdominal, acidez, la digestión pesada y lenta y la aparición de gases.