Asamblea Nacional de Cuba elige el jueves nuevo presidente

Después de 47 años de Gobierno del comandante Fidel Castro Ruz y tras una década de su hermano Raúl, la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) de Cuba elegirán al nuevo presidente de la República el jueves 19 de abril de 2018.

Es un cambio crucial para la Revolución cubana, porque sus enemigos han sostenido a lo largo de todos estos años que este proceso arraigado en el sentir popular se sostiene por los hermanos Castro, subestimando la fuerza del pueblo.

Los 605 diputados y diputadas de la ANPP serán según la Constitución los encargados de elegir al nuevo presidente, en un acto que se efectuará un día después que se instale, en el Palacio de Convenciones de La Habana a las 9:00 de la mañana, la IX Legislatura de la Asamblea Nacional.

El jueves se elegirá al Consejo de Estado, órgano integrado por un Presidente, un Primer Vicepresidente, cinco vicepresidentes, un Secretario y 23 miembros, el máximo representante de esta instancia, es a su vez jefe de Estado y de Gobierno de acuerdo con la Constitución cubana

El sustituto de Castro, según fuentes extraoficiales, provendrá de la generación de relevo, en la persona del actual primer vicepresidente Miguel Díaz-Canel, quien ha llevado en sus espaldas la responsabilidad de la actualización del socialismo cubano.

Cuba ha decidido abrirse de a poco al ingreso de la inversión extranjera, ha restablecido sus relaciones con Estados Unidos y está en proceso de implementar diferentes reformas tanto económicas como sociales iniciadas por el presidente Raúl Castro Ruz.

En esta ardua tarea de actualización del modelo socialista cubano, de ser elegido por la Asamblea Nacional de Poder Popular, Díaz-canel no estará solo, cuenta con una partido comunista, ejército y pueblo organizado cohesionado.

Además, Raúl Castro Ruz no se retirará de la política seguirá al frente del poliburó como Primer Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba. Su experiencia en 57 años de revolución será invaluable para el nuevo equipo de Gobierno, más aún, cuando el presidente estadounidense Donald Trump ha amenazado con echar para atrás los avances en las relaciones diplomáticas, impulsadas por su antecesor Barack Obama.