La semifinal entre el Bayern Múnich y el Real Madrid que se inicia este miércoles en el estadio Allianz Arena del cuadro muniqués es una de las batallas futbolísticas con más historia en el fútbol de Europa. Se inició cuando la actual Liga de Campeones era la Copa de Europa y el Bayern comenzó a levantar su fama de bestia irreductible para los merengues al eliminarlos 2-0 en la semifinal de aquel primer enfrentamiento.
Pero el temible gigante alemán que solía amedrentar al Madrid se ha ido empequeñeciendo en las últimas temporadas, desde que Cristiano Ronaldo se convirtió en la máxima figura de los blancos. En la semifinal de 2014, el Bayern dirigido entonces por el técnico catalán Pep Guardiola amenazaba arrasar al Madrid con su fútbol asociado y potente, sólo que el astro portugués tenía otros planes y en una de sus jornadas más pletóricas anotó dos goles en el choque de vuelta en Múnich que, unidos a otros dos tantos del defensa Sergio Ramos, aplastaron 0-4 al Bayern en su propio terreno. El Madrid avanzó a la final en la que venció 4-1 al Atlético de Madrid en tanda de penales para levantar la décima copa.
El año pasado en cuartos de final se repitió la historia. El Bayern Múnich esta vez con el técnico italiano Carlos Ancelotti en el banquillo, el mismo entrenador que había conducido al Madrid tres años atrás en la soberbia paliza que los merengues propinaron a los bávaros, llegaron otra vez con la chapa de favoritos a pasar de ronda. Pero otra vez se toparon con la voracidad goleadora de Cristiano Ronaldo, quien anotó dos tantos en el primer duelo ganado 1-2 por el Madrid en el Allianz Arena, y remató la faena con otros tres tantos en el Bernabéu para propinar otra zarandeada de 4-2 al Bayern, camino a la orejona número 12 de su historia.
Para este miércoles, el Real Madrid llega al primer duelo de la cita en Múnich con Cristiano Ronaldo en máxima plenitud. El portugués estableció otra marca esta temporada al anotar en once partidos consecutivos de la Champions y con 15 tantos está a dos del récord de 17 anotaciones que le pertenece desde la temporada 2013-2014.
Pero el Madrid es más que Ronaldo. La mitad del campo con Toni Kroos, Lucas Modric y el brasileño Casemiro es una de las más sólidas, a lo que hay que agregar la explosión de Isco como generador de juego y definidor. Con esa fortaleza en todas sus líneas el cuadro español apunta a llegar a la final y conquistar su tercera copa consecutiva.
El Bayern Múnich rejuveneció esta temporada de la mano del experimentado entrenador Jupp Heynckes que intenta de nuevo la hazaña de alcanzar otro triplete de Bundesliga, Copa de Alemania y Champions, tal como lo hizo en la temporada 2012-2013. El entrenador alemán recuperó el desborde del francés Ribéry y las diagonales endemoniadas del holandés Robben.
El colombiano James Rodríguez también se convirtió en un volante más completo, capaz de defender con la misma habilidad para pisar el campo rival con peligro. Pero la ausencia del chileno Alexis Vidal por lesión, le resta quite y garra en la mitad del campo. En el ataque, la potencia del polaco Robert Lewandowski y de Tomar Müller son las armas más contundentes que tienen los muniqueses para lastimar al Madrid.
La historia del fútbol europeo tiene otra batalla entre dos titanes que nunca se dan por vencidos en el terreno. El ganador posiblemente levante la copa en la final del 26 de mayo en el estadio Olímpico de Kiev.