De acuerdo con declaraciones de tres funcionarios británicos las reuniones y pernota del mandatario norteamericano probablemente ocurran en otra ciudad del Reino Unido, se prevé que la cita con la reina se efectúe en el Castillo de Windsor y con May en su casa de campo.
Los funcionarios manifestaron que el Gobierno británico sabe que la visita de Trump generará malestar en la ciudadanía del Reino Unido y protestas grandes perjudiciales, por ello resulta favorable para ambas partes que los encuentros se lleven a cabo fuera de la capital.
Luego de que May se convirtiera en la primera líder extranjera en reunirse con Trump en Washington DC, el jefe de la Casa Blanca anunció que realizaría una visita al Reino Unido hace más de un año; pero las duras críticas hacia el presidente imperial por posiciones políticas contrarias a los inmigrantes y a los musulmanes, además de la vinculación con la extrema derecha tuvo no solo que suspender su llegada a la nación británica sino la inauguración de la nueva embajada en 2017.
La primera ministra destacó que existe una fuerza de «relación especial» entre ambas naciones y a su vez, extendió una invitación a la reina Isabel II para que participará en el encuentro.
En el Foro Económico Mundial de Davos, Suiza, tras la reunión entre May y Trump resurgió la posibilidad de un viaje a la nación europea en el segundo semestre de este año. Sin embargo, las reacciones ante la confirmación del mandatario de Washington no se hicieron esperar, pues algunos parlamentarios europeos y movimientos sociales anunciaron que realizarán protestas contra el estadounidense.