Guterres advierte sobre escalada del conflicto en Yemen

El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, expresó hoy una gran preocupación por la reciente y aguda escalada del conflicto en Yemen entre Arabia Saudita y los rebeldes houthis, dijo el vocero de la ONU, Stephane Dujarric.

Los ataques aéreos de la coalición militar encabezada por los sauditas alcanzaron el lunes un edificio gubernamental en Saná, la capital yemení controlada por los rebeldes. En tanto los rebeldes houthis lanzaron el domingo y el miércoles misiles balísticos contra diferentes objetivos en Arabia Saudita.

Guterres recordó a todas las partes del conflicto que deben respetar la ley humanitaria internacional y que esto incluye tomar medidas para proteger a los civiles, dijo Dujarric en una declaración. «Todas las posibles violaciones al derecho humanitario internacional deben ser investigadas a fondo y los responsables de ellas deben rendir cuentas».

Antonio Guterres, secretario General de la ONU

El jefe de la ONU apeló a las partes para que se abstengan de una nueva escalada y les recordó que la solución política negociada a través del diálogo inclusivo entre yemeníes, es la única manera de poner fin al conflicto y de hacer frente a la actual crisis humanitaria.

La coalición militar liderada por los sauditas no cuenta con autorización de Naciones Unidas para ejecutar ataques contra Yemen. Por tanto sus acciones se encuentran fuera del derecho internacional. Su objetivo es derrotar a los houthis con el fin de restablecer el gobierno a su aliado Hadi.

Según propios informes de la ONU, mas de 2 millones de yemeníes requieren de ayuda humanitaria de forma urgente, entre ellos toda su población infantil. Los bombardeos sauditas has destruído buena parte de la infraestructura civil de la nación ubicada al sur de la península arábiga.

De acuerdo con reportes de la UNICEF, 2500 escuelas han sido destruidas por la guerra. Las edificaciones se usan con fines militares o acogen a personas desplazadas. La miseria ha impedido que la mayoría de las familias puedan sostener a sus hijos en lo poco que queda del sistema escolar.