Este sábado 12 de mayo se cumplen cuatro años del fallecimiento del ilustre médico venezolano Jacinto Convit, quien fue una pieza clave en el desarrollo de la vacuna contra la lepra.
Nació en Caracas el 11 de septiembre de 1913 y dedicó su vida entera a la medicina con el propósito firme de encontrar la cura a distintas enfermedades.
Su figura llenó a Venezuela de buenas noticias. De hecho, recientemente la fundación que lleva su nombre validó una vacuna para el tratamiento contra el cáncer de mama cuya propuesta él publicó en 2006 en la Gaceta Médica de Caracas.
A la Escuela de Medicina de la Universidad Central de Venezuela (UCV) ingresó en 1932. La inquietud por la lepra nació en 1937 cuando un profesor de dermatología lo invitó a visitar una leprosería.
Desde entonces luchó por darles a los afectados la posibilidad de una mejor vida. Primero fue médico director de las leproserías nacionales, luego de los Servicios Antileprosos Nacionales hasta llegar a ser el jefe de la División de Lepra.
Sus investigaciones fueron fundamentales para lograr el desarrollo de la vacuna en 1987. Pero su lucha no quedó allí, también dio valiosos aportes hasta crear la vacuna contra la leshmaniasis y en sus últimos años de vida se abocó a los estudios sobre el cáncer.
En Estados Unidos obtuvo los títulos de Licenciado y MSc en Química en la Universidad de Delaware y se doctoró en Química de la Universidad de Tulane en Louisiana.
Estos son algunos de los reconocimientos nacionales e internacionales que recibió por su invaluable labor:
- En 1988 fue postulado al Premio Nobel de Medicina.
- Fue Director del Centro Colaborador para Referencia e Investigación en Identificación Histológica y Clasificación de la Lepra (OMS) desde 1971.
- Fue miembro del Consejo de la Facultad de Medicina a partir de 1973 y del Sistema de Promoción del Investigador en 1994.
- Recibió el Premio José Gregorio Hernández en dos ocasiones
- Le otorgaron la medalla Federación Médica Venezolana en 1987
- La Organización Panamericana de la Salud le entregó la medalla «Salud para todos en el año 2000».
- Sus méritos también le valieron el premio Príncipe de Asturias y la Legión de honor en Francia, refiere la Fundación Bengoa.