La visita de la banda austriaca Valina es la ocasión para que el trío formado por Rodrigo Laiseca, Nicolás Farías y Patricio Zamorano presenten su primer disco, una propuesta homónima que recoge los sonidos de sus experiencias musicales pasadas y los alimenta a punta de vocalizaciones colectivas y una instrumentalidad que equilibra groove y calma.
Empezaron a tocar dos semanas antes del terremoto del 27 de febrero de 2010. Laiseca venía de tocar varios años con Familea Miranda; Farías hizo lo suyo en las cuerdas gruesas para Innombrable; Patricio Zamorano, tras la disolución de Neurotransmisor, dejó de lado la guitarra para improvisar con su trompeta en diversos ensambles más o menos libres y efímeros.
Hoy, luego de dos años de silencioso trabajo y un puñado de tocatas, están prestos a presentar su primer disco de ocho canciones, grabado íntegramente por ellos (con apoyo técnico de Coraje Records) y que será editado por Pactante Discos.
Todo fluyó de la improvisación, el análisis y la edición, explica Farías. Como suele ocurrir, una vez identificadas las partes que podían tener alguna proyección fueron construyendo las canciones.
“Al tiempo después dijimos «cantemos», y ahí empezamos a hacer las letras y las voces”, explica el bajista, sobre un hecho clave para no limitar a Losmodestos en el amplio abanico de bandas instrumentales acomodadas en los post.
“El sonido del disco apunta a plasmar la realidad de lo que somos, sin fuegos de artificio. Música y letras que surgieron espontáneamente en improvisaciones, en medio de carcajadas y celebraciones. El sonido tenía que tratar de representar eso”, complementa Laiseca.
Esta idea la amplía al arte y al diseño: “Cada día aparecen discos con dibujitos en su carátula, auto-referencias disfrazadas o efectos especiales. Nosotros quisimos poner algo auténtico, algo que existe y se ve tal cual es. Fotos que representen el concepto de modestia como lo vemos nosotros. Los seres humanos no tenemos mucho de eso, así que pusimos otros seres vivos y listo”, continúa el baterista.
Si bien el sonido y la composición de Losmodestos guarda relaciones más o menos evidentes con las ex bandas de sus integrantes (FM e Innombrable, especialmente), se aprecia una disposición menos “cerebral”, un fluir y transitar por estilos e intensidades que, más allá de la minucia, expresan placer y divertimento.
“A mí y a Laiseca nuestras bandas anteriores nos dieron el cimiento para poder hacer buenas bases. En el caso del Pato siempre ha fluido más tocando”, señala Farías al respecto.
“Francamente tenemos cierta libertad que nos permite hacer música sin pensar que es producto de influencias -replica Laiseca. “Lo que no garantiza que alguien no se acerque a decirnos «ese tema se parece caleta a…», o que nuestro estilo se parece a otro estilo o a otra banda del pasado o que somos unos hueones sin estilo…, lo cual creo se acerca más a la realidad. No nos complica pasar de la onda disco al punk rock. Al menos nosotros no nos sentimos tan influenciados. La sensación es más bien virginal”, indica.
Respecto a si el nombre responde a una ironía en relación al rock chileno, el mismo Laiseca se apresura a responder: quizás de alguna manera, y a la actitud humana en general. Animalizarse un poco, dejar de pensar y usar el instinto. Simplemente quisimos hacer algo sin pretensiones mayores que sólo tocar y pasarlo bien. Eso es lo primero, lo más importante, aunque no te libra de problemas”, concluye.
Losmodestos se presentan este sábado 31 de marzo junto a Valina en Bar Onaciú, desde las 23 horas. Entrada a 3 mil pesos.
+ INFO: Descargue Piranha de Losmodestos. Lea una Entrevista a Valina
Por Cristóbal Cornejo
El Ciudadano