El presidente de Ecuador, Lenín Moreno, retiró de «forma inmediata» cualquier tipo de seguridad adicional de la embajada ecuatoriana en Londres, Inglaterra, donde se refugia desde 2012 el fundador de Wikileaks, Julián Assange.
En un comunicado, la Secretaría Nacional de Comunicación (Secom) indicó que el Gobierno ha determinado que «mantendrá el resguardo normal similar al del resto de embajadas ecuatorianas en el mundo».
La medida se produjo luego de que el diario británico The Guardian informara el pasado martes que Ecuador ha invertido unos 5 millones de dólares en una «operación de espionaje» para «proteger» a Assange en su embajada en Londres.
Según una investigación de The Guardian y Focus Ecuador dicha operación habría contado con la aprobación del entonces presidente ecuatoriano, Rafael Correa (2007-2017) y del entonces canciller, Ricardo Patiño.
En marzo pasado, el gobierno de Ecuador suspendió los sistemas que permiten a Assange, comunicarse con el exterior desde la embajada ecuatoriana en Londres, donde permanece en situación de protección internacional desde 2012.
La medida se adoptó debido a que Assange, incumplió un acuerdo de no opinar sobre asuntos de otros países.
Entonces, la cancillería ecuatoriana defendió la decisión señalando que el Gobierno actúa en el más estricto apego a la Constitución, las leyes y el derecho internacional.
Ecuador «mantiene en todo momento su actuación en defensa de los derechos humanos y del interés nacional», apuntó.
El ex programador informático y periodista australiano se refugió en la embajada de Ecuador en Londres para evitar ser extraditado a Suecia y ser interrogado por supuestos delitos sexuales cometidos en 2010, que él niega.
En mayo pasado, la Fiscalía sueca archivó una causa pendiente, lo que debería permitirle abandonar la embajada ecuatoriana, sin embargo, Reino Unido rechaza el asilo concedido por Ecuador y se niega a otorgarle un salvoconducto para que pueda viajar a Quito.
Assange, cree que el proceso en Suecia era parte de una maniobra para enviarle a Estados Unidos, donde podría ser juzgado por espionaje al publicar en el sitio WikiLeaks miles de documentos filtrados de información confidencial de ese país.
En diciembre pasado, el gobierno de Moreno le otorgó la nacionalidad ecuatoriana y pidió a Reino Unido que se le concediera el estatus diplomático, pero la solicitud fue negada.