El expresidente uruguayo José Mujica (2010-2015) aseguró hoy que el tratado de libre comercio (TLC) firmado entre su país y Chile en octubre de 2016 no «mueve la aguja, ni para bien ni para mal».
«No me jodan con el acuerdo de Chile. Ni para bien ni para mal nos mueve la aguja», aseguró ante la prensa el exguerrillero tupamaro respecto al acuerdo comercial,reseñó la agencia EFE.
El pasado 5 de mayo la coalición de izquierdas que gobierna el país, el Frente Amplio (FA), celebró un Plenario Nacional, máximo órgano de decisión de la agrupación, para analizar la política de inserción internacional del Gobierno y la ratificación del TLC con Chile.
La coalición izquierdista resolvió en esa reunión postergar la decisión sobre el acuerdo con Chile y pidió al Poder Ejecutivo conocer más datos sobre su contenido.
Mujica, que lidera el sector Movimiento de Participación Popular (MPP), que integra el oficialismo, señaló este viernes en rueda de prensa que él «votaría tranquilo» la ratificación del acuerdo en el Parlamento.
Sin embargo, dijo que con sus declaraciones no «arregla nada» y que lucha por sacar decisiones a favor de lo que piensa.
En 2015, el intercambio comercial entre Chile y Uruguay sumó 336 millones de dólares. Las exportaciones chilenas totalizaron 148 millones de dólares, mientras que las importaciones fueron de 188 millones de dólares.
En Chile y Uruguay el sector externo representa alrededor del 60% de sus economías, por ello para ambos es fundamental que existan normas y reglas comerciales justas que den certidumbre y alienten el comercio y la inversión. El TLC firmado en octubre de 2016 entre ambos países es una oportunidad para desarrollar esas normas e incorporar nuevas temáticas con un sello progresista del comercio y sus beneficios para todos.
Hoy el multilateralismo en el mundo no avanza todo lo que debería y las negociaciones bilaterales han tejido una red complejísima de acuerdos comerciales que hacen que los países ganan competitividad abriendo mercados, plantearon ambos países para avanzar en el acuerdo.
Muchos de los competidores gozan de privilegiadas condiciones de acceso en los mercados de exportación que es necesario retomar, plantearon naciones en la exposición de motivos.