El mandatario venezolano declaró este sábado,que rechaza rotundamente la noticia dada a conocer por el presidente de Colombia Juan Manuel Santos, donde queda contemplado que ese país pasará formalmente a integrar la Organización de Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Venezuela rechaza adhesión
Como consecuencia del anuncio proveniente de la casa de Nariño, en donde se informa que el presidente viajará a Bélgica la semana próxima con la finalidad de materializar la adhesión definitiva de esa nación como socio global de la OTAN, el gobierno de Venezuela a través de su cancillería expresó mediante comunicado, que considera la decisión tomada por el gobierno neogranadino como “una seria amenaza para la paz y la estabilidad regional».
Según lo expresado por el Gobierno Revolucionario de Venezuela liderado por Nicolás Maduro, el país vecino se estaría prestando para permitir el ingreso en la región de «una alianza militar externa con capacidad nuclear», hecho que evidentemente pondría en peligro «la posición histórica de América Latina y el Caribe” de mantenerse al margen de cualquier política y acción que conlleve a acciones guerreristas.
Ingreso a la región de organismos guerreristas
El mandatario venezolano expresó su preocupación, dejando entrever que muy por el contrario a la conducta de este hemisferio, desde el seno de la OTAN y demás ejércitos si se han protagonizado en innumerables oportunidades actos para imponerse por la fuerza garantizando de esta manera el dominio hegemónico de un modelo político en particular.
Sobre la base de las consideraciones anteriores desde Venezuela, insto a Colombia a que se adhiera a las tratados internacionales emanadas de acuerdos con organizaciones pertenecientes a la región como lo son la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), la cuales a su dentro de sus normativas observan mecanismos creados especialmente para conservar la paz.
En el comunicado igualmente se trae a colación el hecho que Colombia es firmante del «Tratado de Tlatelolco donde se proscriben las de Armas Nucleares en América Latina y el Caribe, también suscribo la Declaración de La Habana de la Celac, donde se declara a América Latina y el Caribe como Zona de Paz».