Por cuarto año consecutivo los Warriors de Golden State avanzan a la final de la NBA, en la que enfrentarán de nuevo a los Cavaliers de Cleveland de LeBron James, una rivalidad que se está volviendo tan histórica como la sostenida por los Celtics de Boston y los Lakers de Los Ángeles a finales de los ochenta y principios de los noventa.
Una vez más el base Stephen Curry fue esencial para vencer de visitante 92-101 a Houston y clasificar a Golden State a la serie decisiva por el anillo de campeón que inician el jueves en Oakland.
Comandados por la puntería de Curry, Golden State remontó una temprana desventaja de 15 tantos, y fiel a su costumbre demolió a sus rivales en el tercer cuarto.
Los Warriors, actuales campeones de la NBA, defenderán el título que han ganado dos veces en los últimos tres años, mientras que los Cavaliers lograron el primero de su historia en el 2016.
Curry inició desacertado desde larga distancia, pero fue calentando el pulso y brilló en el tercer cuarto. El base dejó una línea de 27 puntos, siete triple, 10 asistencias y nueve rebotes defensivos.
Su mejor socio en el ataque fue el alero Kevin Durant que convirtió 32 tantos, con cinco triples, tomó cinco rebotes y dio igual número de asistencias.
Houston tuvo un comienzo fulgurante, pero a partir del tercer cuarto su defensa permitió los tiros fuera del perímetro de Curry.
Gracias a los efectividad de Curry, Golden State sacó una ventaja de once puntos que Houston no pudo rebanar.
El barba James Harden fue el más efectivo de Houston con 32 puntos, aunque se volvió a mostrar deficiente desde los tres puntos con apenas 2 aciertos en 13 lanzamientos.
La ausencia por lesión del base-escolta Chirs Paul afectó la producción de los Rockets. Paul buscaba avanzar a la final de la NBA por primera vez, luego de 13 temporadas.
Desde el jueves la historia se repetirá. La hermandad de los triples integrada por Stephen Curry, Klay Thompson y Kevin Durant va por su tercer título en cuatro temporadas ante los mismos Cavaliers del King James, que busca destronar a los actuales campeones como lo hizo en 2016.