La Asociación de Corresponsales de la Prensa Internacional en Chile (ACPI) denunció hoy la agresión sufrida por un equipo de Telesur de parte de un funcionario de la embajada israelí en esta capital.
Deploramos y consideramos grave la agresión sufrida por el equipo de Telesur en plena vía púbica, señaló una declaración de la ACPI que preside aquí Mauricio Weibel, presidente además de la Unión Suramericana de Corresponsales.
La arremetida tuvo lugar la víspera cuando el equipo de Telesur en Chile, que integran la corresponsal Beatriz Michell y el camarógrafo Hugo Fuentes, acudieron frente a la legación diplómatica a tomar imágenes de la entrega de una carta de la Federación Sindical Mundial, pidiendo la libertad de prisioneros palestinos.
Estando en la calle dos funcionarios de la embajada les pidieron identificación a los profesionales de la prensa extranjera, quienes mostraron sus credenciales entregadas por el gobierno chileno.
Según precisó la dirección de la Asociación de Corresponsales al resto de la prensa extranjera acreditada en esta ciudad, «luego, desde el interior de la embajada, salió un sujeto que sin identificarse empujó a los trabajadores de Telesur y comenzó a gritarles que se fueran».
Se trata de una acción inaceptable que la embajada de Israel debiera comprometerse a no repetir, además de pedir disculpas al equipo de Telesur, subrayó el comunicado de la ACPI.
Este deleznable incidente, remarcó Weibel, no sólo es una agresión contra los derechos de la comunicación y la libertad de expresión, sino que configura una violación del propio status que rige la presencia y actividad de las representaciones diplomáticas en cualquier país.
Pidió por tanto que la cancillería chilena exprese su malestar a la representación israelí.
Los profesionales de la prensa y los ciudadanos de Chile no pueden estar expuestos a los excesos, la prepotencia y los ataques físicos de agentes de seguridad extranjeros, enfatizó.
En el contexto de la agresión a la cadena televisiva llegaron al lugar Carabineros chilenos que identificaron al agresor como jefe de seguridad de la embajada, acotó Weibel.
Como presidente de la Unión Suramericana de Corresponsales, entidad que agrupa a todos los periodistas que trabajan para medios internacionales en la región, Weibel reiteró que el hecho es de la mayor gravedad y dijo coincide con el deterioro de las condiciones de ejercicio del periodismo en Chile.
En 2011, ilustró, hubo una veintena de periodistas y fotógrafos de la prensa internacional que fueron agredidos, amenazados y detenidos por la policía chilena.
Santiago de Chile, 18 abr (PL)
Por Prensa Latina