Fotografiar a las mujeres bajo la falda sin su permiso será delito penado con hasta dos años de cárcel en el Reino Unido, a raíz de un caso que puso el foco en esta práctica cada vez más extendida.
El gobierno de Theresa May anunció su apoyo a esta propuesta de ley presentada por la diputada liberal-demócrata Wera Hobhouse y que cuenta con apoyo de gran parte del Parlamento, lo que asegura, salvo sorpresa, un recorrido legislativo exitoso.
La secretaria de Estado de Justicia, Lucy Frazer, dijo, al anunciar su apoyo a esta ley contra el «upskirting», que «esta conducta es una invasión odiosa de la privacidad que deja en las víctimas un sentimiento de degradación«.
«Al convertirla en un delito específico, enviamos un mensaje claro de que no toleraremos esta conducta y quienes la perpetren serán castigados adecuadamente», añadió.
“Upskirting” es el término con el que se ha bautizado la moda de hacer fotos por debajo de las faldas de las chicas sin su consentimiento. Una tendencia que se ve repetidamente en el metro y en los autobuses de Londres.
Se han recogido cerca de 63.000 firmas donde se demandaba a los parlamentarios que hicieran del “upskirting” un delito. Todo empezó después de que Gina Martin, una joven londinense de 26 años, viera a un hombre haciéndole una foto por debajo de la falda en un concierto al que fue con su hermana en Hyde Park el pasado 8 de julio de 2017, reseñó el diario El Ibérico.
Martin, al darse cuenta de lo que estaba pasando, le arrebató el móvil al agresor para después mostrárselo a la policía pero aun así no pudo presentar cargos.
Pese a sus intentos de juzgar su denuncia, la práctica no estaba tipificada específicamente como delito y encajaba mal con los de desorden público o indecencia.
Muchas de estas imágenes acaban siendo publicadas en páginas web pornográficas.
La nueva ley alineará este delito con los de «voyeurismo» y expondrá a sus responsables a penas máximas de dos años.
«Es una gran noticia, y se produce gracias a todos los que nos escucharon», dijo Martin a la agencia británica Press Association.
«Quiero dar un abrazo a todas las mujeres que se pusieron en contacto conmigo para decirme que a ellas también les había ocurrido, para decirles que ahora, esperemos, podremos hacer justicia a las víctimas», añadió.