Naciones Unidas conmemora cada 20 de junio el Día Mundial del Refugiado con renovados llamamientos para hacer frente a la peor crisis de desplazados que afecta a más de 60 millones de personas.
Los refugiados son personas que huyen del conflicto y la persecución. Su condición y su protección están definidas por el derecho internacional, y no deben ser expulsadas o devueltas porque ésto, representa un peligro inminente, en las que sus vidas y sus libertades corren riesgo.
En la actualidad presenciamos los niveles de desplazamiento más altos jamás registrados, según lo reseña en su portal la Organización de Naciones Unidas.
Una cifra sin precedente de 65,6 millones de personas en todo el mundo se han visto obligadas a huir de sus hogares. De los casi 22,5 millones de refugiados, más de la mitad son menores de 18 años.
El organismo de las Naciones Unidas para los refugiados, la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), lanzaron la campaña #ConLosRefugiados en Junio de 2016 para pedir a los gobiernos que colaboraran y cumplieran con su deber en relación a los 65,6 millones de personas que se encuentran en esta situación.
En el Día Mundial del Refugiado, conmemora la fuerza, valor y perseverancia, que brinda la oportunidad de mostrar el apoyo a familiares que se han visto obligadas a huir.