El incremento se debe a la modificación del Impuesto a los Combustibles Líquidos y al Dióxido de Carbono del 6,7 por ciento establecido por la Administración Federal de Ingresos Públicos.
Asimismo, las empresas petroleras advirtieron que la devaluación del dólar y el retraso en el 30 por ciento de la producción de crudo importada seguirán generando más incrementos desmedidos y acelerados en los precios. reseña Telesur
Los precios de los distintos combustibles en la nación suramericana quedaron de la siguiente manera:
El litro de nafta súper que costaba $ 25,24 (1.01 dólares) pasó a $ 26,37 (1.06 dólares); la Premium, que costaba $ 29,28 (1.17 dólares) pasó a $ 30,6. (1,20 dólares).
Por su parte el diesel común, a un costo actual de $ 22,06 (0.88 dólares) pasó a $ 23,16 (0.93 dólares) y el gasoil premium, de $ 25,70 (1.03 dólares), llegó a los $ 26,98 (1.08 dólares).
Así, para llenar el tanque de un auto con nafta premium se necesitan unos $ 1202,4 (48.18 dólares) y para hacerlo con gasoil premium, $ 1079 (43.23 dólares).
El Gobierno argentino logró congelar las tarifas del combustible por pocas semanas pero el alza del dólar aceleró los costos, sumado al aumento del crudo, por la baja de los precios en el mercado internacional siguen afectado la economía y los aumentos generales en Argentina desde 2015.
Durante en el mes de mayo los argentinos protagonizaron protestas en contra de los ajustes y medidas económicas impuestas por el presidente de Mauricio Macri; denominaron la actividad «Marcha Federal por Pan y Trabajo».