En las redes sociales se han viralizado las imágenes en las que se ve cómo un tiburón nodriza leonado apresa por la mano a una mujer que trataba de darle de comer y la arrastra bajo el agua.
La protagonista del video, grabado a finales de mayo, es Melissa Brunning, una mujer australiana que estaba de vacaciones en la bahía de Dugong, en el noroeste de su país.
Brunning, de 34 años, señaló que todo ocurrió muy rápido y lo primero que pensó es que «había perdido el dedo». «Tuve la impresión de que me trituró hasta el hueso», confesó.
Sin embago, la australiana fue afortunada y logró conservar su dedo índice, pese a sufrir una fractura, un ligamento destrozado y una grave infección.
Brunning no culpa al tiburón y admite que después de lo sucedido aprendió a «respetar a la fauna marina, a observarla con admiración y dejarla tranquila».