El ejército sirio continúa retomando el poder en la zona sur del país, dominada por grupos armados radicales, y se ubicó a 6 kilómetros del puesto de Nassib, en la zona fronteriza con Jordania, punto enclave de grupos irregulares.
“Tanques de guerra se aproximaron por primera vez en los últimos seis años a las fronteras con Jordania dentro de los límites administrativos de la provincia de Deraa”, indica Prensa Latina en un boletín.
Las fuerzas sirias, que establecieron un puesto de observación en el punto fronterizo 71, están siendo acompañadas en esas operaciones por la policía militar rusa, precisaron los reportes divulgados por las autoridades y referidos por varios medios.
Tras un proceso de rehabilitación, desde la base militar aérea de Thalaah, ubicada en el este de Deraa -sur- e inactiva desde hace cuatro años por ataques de grupos armados, despegó el primer avión de combate del ejército.
Mientras tanto, las fuerzas gubernamentales prosiguieron este viernes con los bombardeos de artillería contra posiciones de los grupos terroristas Estado Islámico y Frente al-Nusra en la ciudad de Tafas, al norte de Deraa.
En las cercanías de esa localidad, las tropas regulares capturaron la montaña de Al-Sadah.
Mediante fuertes ataques en la ciudad de Um Maysem, en el este de Deraa, la aviación siria ultimó a decenas de extremistas y destruyó parte de su material bélico, indica el medio cubano.
Una vez que concluya la operación del Ejército en las provincias sureñas-que ya llevan 13 días- las tropas emprenderían una fuerte ofensiva contra formaciones radicales en el norte del país, que incluye Idlib a más de 300 kilómetros de Damasco, capital.
Para estas labores militares, el gobierno de este país de Medio Oriente activó canales de atención médica y alimentos para los desplazados.
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