El senador Alejandro Navarro presentó en el Congreso de Chile una propuesta para que las populares máquinas tragamonedas o «casinos populares» que funcionan en locales improvisados, sin ningún tipo de regulación ni beneficio para el Estado, sean eliminadas en todo el territorio nacional.
El senador chileno reveló que el fiscal Nacional, Jorge Abbott, fue denunciado por dueños de las denominadas máquinas “casinos del pueblo” y que, incluso, una causa se mantiene pendiente.
Ante los abusos de estos establecimientos al margen de la ley, hay dos iniciativas en la Cámara del Senado en relación a las conocidas máquinas de azar que han proliferado a lo largo del país. Un proyecto de ley busca regularlas y otro busca eliminarlas.
Esta última iniciativa es impulsada por el senador de la región del Bío Bío, quien reveló que en la comisión de Gobierno donde se revisan estos temas, ninguno de los invitados -Carabineros, Policía de Investigaciones, Impuestos Internos, entre otros- dan cuenta de que las máquinas sean aporte, «más bien se transforman en un problema», tal como ocurre en Antofagasta, la ciudad donde hay más aparatos.
Siguiendo en esa línea, Navarro reveló, además, que Jorge Abbott, cuando era fiscal regional de Valparaíso en el año 2007, fue denunciado por dueños de estas máquinas, luego de que se ordenara requisarlas. De hecho, «una de estas causas continúa abierta», relató el legislador.
A juicio del Senador, las máquinas -mal llamadas de «destreza- deben ser sacadas de circulación, ya que no aportan en nada al país», motivo por el cual llamó a las autoridades correspondientes a tomar cartas en el asunto, tomando en consideración que «personas de origen humilde caen en la ludopatía y gastan dinero que no tienen».