El día de ayer -8 de mayo-, aproximadamente a las 19.45 horas, alrededor de 20 manifestantes protestaron contra la vivisección (experimentación con animales vivos) en el centro de Santiago de Chile. En pleno silencio, y con imágenes de experimentación en animales, mantuvieron informados a las y los transeúntes sobre esta práctica antiética, según sus convicciones. Esta jornada se realizó en más de 81 ciudades y en 25 países alrededor del mundo.
En los cinco continentes fueron testigos de la jornada contra la experimentación en animales.
Cientos de personas se manifestaron contra la vivisección (disección de animales vivos, muchas veces sin anestesia), luego de que la semana pasada se diera a conocer la noticia de la petición de cierre del criadero “Green Hill” (Montichiari, provincia de Brescia, Italia), lugar donde se crían cientos de perros Beagle para esta práctica.
El día 28 de abril, cientos de italianos e italianas, llegaron a Green Hill, y liberaron a una treintena de perros, cachorros y adultos, salvándolos así, de una vida condenada al sufrimiento y maltrato por parte de seres humanos.
Debido a esta acción, es que la organización animalista vegana Animal Libre, realizó una manifestación ayer en la tarde en la intersección del Paseo Ahumada con Huérfanos, en Santiago.
Algunos transeúntes pasaban de largo, otras y otros, sin embargo, miraban atentamente a las personas que sostenían carteles con fotos de experimentos en animales y a quienes tenían un sticker que cifraba: “Libertad”, pegado en la boca.
“Esta actividad es para que la gente se informe del tema. Por ejemplo, en Europa, se pudo ver diferentes acciones colectivas contra el criadero Green Hill”, manifestó Felipe, activista de Animal Libre.
Parte del público, se mostró en favor de la intervención de la organización en el centro de Santiago.
“Yo estoy totalmente de acuerdo con lo que hacen, porque encuentro intolerable lo que les hacen a los animales. Somos todos seres vivos”, dijo Susana, quien iba de vuelta a su casa luego del trabajo.
“Esta es una buena actividad, ya que están dando a conocer lo que pasó en Italia, actos muchas veces considerados terrorismo o vandalismo, siendo que la libertad es un derecho para los animales, los cuales no debiesen ser usados para ni para alimentación, entretención o vestimenta”, comentó Dustin, joven vegano –persona que no consume ningún producto de origen animal-.
En otros lugares del mundo también se vivió esta jornada. En Italia, Claudio Pomo, portavoz de “Cerremos Green Hill”, aseguró que cada año, 900 mil animales, son utilizados en laboratorios italianos para investigaciones científicas de diverso tipo.
Esta situación podría modificar la ley tramitada en el Senado italiano, la cual contempla la prohibición de la cría de perros, gatos y primates para la experimentación, además, del uso obligatorio de antestesia en este tipo de prácticas.
En tanto, en Madrid –España-, medio centenar de personas se activaron por los derechos animales, protestando frente a la embajada italiana en ese país, exigiendo el cierre de Green Hill.
Fotos y texto por Francisca Salinas Fernández
El Ciudadano
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