El presidente de Rusia, Vladimir Putin, estrenó este lunes el Aurus Senado, su nuevo vehículo, tipo limusina, a prueba de todo. Se lo mostró al mundo en ocasión del encuentro con su homólogo estadounidense, Donald Trump, en Helsinki, Finlandia.
El nombre de esta “Bestia” de cuatro ruedas, que forma parte de la nueva flota del Kremlin, viene de la combinación de la palabra latina aurum, que significa oro, y del nombre del país, Rusia. El automóvil ya había hecho su primera aparición, pero en Rusia. Esta es la primera vez que se mostró fuera de suelo ruso.
«No se había estrenado antes porque no tenía las suficientes unidades para cubrir todas las necesidades de los viajes del presidente al extranjero», explicó el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
El diseño y ensamblaje estuvo a cargo del Instituto Ruso de Estudios sobre el Automóvil NAMI, en colaboración con ingenieros de la automotriz alemana Porsche. «Este es el primer automóvil de lujo de alta gama fabricado en el país en muchos años», destacó la agencia estatal de información rusa RIA Nóvosti.
El Aurus Senado forma parte del proyecto Kortezh (convoy), que también cuenta con un auto sedán, una minivan y se espera que se produzca una SUV y una motocicleta, que serán bautizados con nombres de las torres del Kremlin, adelantó la BBC.
Las características que exhibe este vehículo híbrido de 6,62 metros de largo y 1,69 de altura son: un motor V8, 598 caballos de fuerza, grueso blindaje, una cápsula acorazada en el chasis de alta seguridad y una velocidad tope de hasta 210 kilómetros por hora.
De acuerdo con el medio ruso, el proyecto Kortezh prevé la producción de una línea de automóviles sobre una base modular que incluirá un sedán-limusina, un monovolumen y un todoterreno. Los autos serán puestos en venta al público en el primer trimestre de 2019 bajo el nombre comercial Aurus.
El Servicio Federal de Protección, responsable de la protección de altos funcionarios del Gobierno ruso, aseguró por su parte que el parque de los automóviles Kortezh iría ampliándose.