Al parecer no todo es placer en el famoso Barrio Rojo de Amsterdam, Holanda. Varios turistas y autoridades han denunciado robos, vandalismo y caos durante las noches en esta zona famosa por sus vitrinas, situación que parecer salirse cada vez más de las manos.
El diario The Mirror informa que en la referida zona se observan a jóvenes – en su mayoría holandeses e ingleses- agrupados en pandillas que comenten robos, venden drogas libremente, hacen carreras ilegales en taxis y bicicletas, así como orinan y defecan en las calles en estado de ebriedad.
En una entrevista al rotativo holandés Trouw -referido por el medio británico- el ombudsman de esta ciudad, Arre Zuurmond, admitió esta realidad. Añadió que mudó su residencia durante dos semanas a Amsterdam y observó en dicho período «900 delitos, entre las 2 y las 4 de la madrugada”.
Holanda es una país de 17 millones de habitantes y recibe anualmente a 18 millones de turistas que en su mayoría se concentran en esta ciudad, famosa por su tolerancia con la prostitución y la marihuana así como por albergar los museos de los famosos pintores Vincent Van Gogh y Rembrandt, indica El País.
Durante la entrevista también dijo que las autoridades han hecho un esfuerzo por contrarrestar el alboroto pero reconoció que las medidas no han sido suficientes. En el Distrito Rojo, -explicó, citado por el medio español- los comerciantes dejan «las basuras en la acera a las cinco de la mañana, y entonces llegan las gaviotas, o las ratas”.
La alcaldesa de Amsterdam, Femke Halsema, ha visitado la zona para conversar con los habitantes y los propietarios de los comercios. Entre las medidas a tomar en los próximo días está reducir a 30 días el alquiler que se ofrece por la aplicación Airbnb y diversificar la oferta comercial en el Distrito Rojo, para evitar la proliferación de tiendas para turistas.
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