Personas con capacidad reducida demandan que se construyan rampas acordes a los niveles correctos de la pendiente en los espacios públicos del sector Santa Rosa, Caracas-Venezuela, debido a que las dos existentes poseen características que las hacen inutilizables e incluso peligrosa.
Este lunes voluntarios, niños, vecinos y personas con movilidad limitada en sillas de ruedas, decidieron protagonizar un cruce de la avenida Andrés Bello bajando una rampa para demostrar las restricciones que estas tienen para desplazarse en la zona.
Los hombres y mujeres en sillas de ruedas cruzaron su ayuda técnica rodante sobre el rayado de círculos pintado por los activistas. En la actividad también participaron personas de todas las edades sin limitaciones, quienes hicieron el recorrido sobre las sillas para sensibilizar a los citadinos, en relación a los derechos de éstos al libre tránsito.
Desde el punto de concentración de la protesta cerca a las inmediaciones del Hospital Ortopédico Infantil, diversas organizaciones explicaron que las angostas aceras, la ausencia de rampas y señalización demuestran el poco interés de las autoridades locales en la planificación.
Además, informaron que el mal diseño del cruce peatonal y el desgaste del urbanismo son una muestra de la carencia de mantenimiento en estas vías que son inapropiadas para las personas con discapacidad.
Cheo Carvajal, miembro de la organización Ciudad Laboratorio y activista a favor de la vialidad en Caracas cuestionó como absurdo que frente al Hospital Ortopédico Infantil «existan este tipo de cruces peatonales no aptos para impedidos”.
El reclamo público a la alcaldía del municipio Libertador estuvo enmarcado en el programa Tres Miradas a Caracas del proyecto Ccscity450, además hicieron acto de presencia las organizaciones Inclúyeme y Discapacidad Cero, para conmemorar el aniversario de la ciudad capital.
“Esta experiencia es fundamental para que tengamos la percepción de lo que ellos viven y seamos multiplicadores en el reclamo de las fallas”, dijo Carvajal.
Existen solo 22 rampas en la capital
«Hemos recorrido 100 vías en Caracas y encontramos que solo hay 22 rampas para personas con problemas de desplazamiento, cuando debería haber un centenar. Además, 64% de estas no cumple con los niveles correctos de la pendiente», denunció Cheo Carvajal, actividad por vialidad en Caracas.
El integrante de la organización explicó que el proyecto Ciudad Hospitalaria busca mejorar la movilidad de Santa Rosa hasta Plaza Venezuela.
Mural para recordar las necesidades
Durante el encuentro, artistas urbanos continuaron pintando el mural ubicado frente a la Escuela Comunitaria Luisa Goiticoa, iniciado hace tres meses para recordar los problemas viales que enfrentan las personas con capacidad reducida.
“Queremos concientizar a los ciudadanos, que reflexionen a través de la imagen y el mural sea el detonante. Además, es un homenaje para la gente que tiene problemas para movilizarse”, expresó Jesús Briceño, artista plástico y miembro de la fundación Haciendo Ciudad.
En Venezuela se hace urgente seguir fortaleciendo las políticas públicas en materia de derechos para las personas con capacidad reducida, pues deben hacerse adaptaciones arquitectónicas y accesibilidad en la ciudad.
En el transporte público solo el 10% es de fácil acceso a estas personas y las aceras de las principales avenidas de la capital no poseen rampas, los semáforos no emiten sonido y las 22 estaciones de la línea 1,2 y 3 del Metro de Caracas carecen de ascensores.
Hay sillas de ruedas que no pasan por las puertas de los edificios de los urbanismos de la Gran Misión Vivienda, el acceso de los inmuebles mide 67 cm de ancho y deberían medir 90, según las normas de la Comisión Venezolana de Normas Industriales (Covenin).
Ley para personas con discapacidad
En Venezuela los derechos de las personas con capacidad reducida tiene rango constitucional y de la carta magna se desprende la normativa que los protege. En ese sentido, el reglamento establece las siguientes medidas para que estos seres puedan movilizarse en las aceras, plantas y abordar el transporte público del país.
Aceras: El ancho mínimo de paso libre de obstáculos se fija en 200 cm, necesarios para un usuario con perro guía o persona guía. A diferencia de el alcantarillado, lo cual la separación entre sus barras o mallas tiene que ser menor o igual a 2 cm, preferiblemente en cuadrícula. Mientras que la textura y relieve de los pavimentos deben permitir el desplazamiento sin tropiezos.
Plantas: Plantaciones de árboles no deben invadir espacios peatonales en alturas inferiores a 220 cm. En caso de que esto no sea posible debe ponerse una valla perimetral protectora. En cuanto, el mobiliario urbano se proyectará linealmente para que no provoque el serpenteo o deambulación en zig zag del peatón. En zonas como Candelaria y Las Mercedes se incumple la medida.
Transporte: Los accesos a los autobuses serán sin escalones de descanso y permitirán la entrada de sillas de ruedas a través de plataformas. En los subterráneos, las escaleras mecánicas tendrán velocidad lineal inferior a 50 centímetros por segundo para dar tiempo a que el usuario se una al pasamano. Las nuevas líneas del Metro y el ferrocarril cumplen con esto, pero el aumento de los usuarios dificulta su cumplimiento.
https://www.elciudadano.cl/latino-america/venezuela-hace-historia-en-la-cidh-por-reivindicar-derechos-de-personas-con-discapacidad/05/12/