Desde tempranas horas de este lunes el pueblo venezolano se concentrará en la céntrica Plaza Morelos, sector Bellas Artes de Caracas, para marchar hasta el Palacio de Miraflores (oeste), con el fin de respaldar al presidente Nicolás Maduro, quien fue blanco de un intento de magnicidio.
Según informa la estatal Agencia Venezolana de Noticias (AVN), la manifestación es para repudiar este ataque perpetrado con artefactos voladores cargados de explosivos, mientras el jefe de Estado dirigía este sábado un discurso por los 81 años de fundación de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB).
Por este hecho – que ha sido rechazado tanto por gobiernos, pueblos, organizaciones y voceros políticos del mundo- están detenidas, hasta la tarde de este domingo, seis personas a las que se les determinó que incurrieron en los delitos terrorismo y magnicidio en grado de frustración, indico el ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Néstor Reverol, informa AVN.
Esa misma noche, el presidente venezolano se dirigió al país y señaló como autores intelectuales a la oligarquía colombiana, específicamente al presidente saliente de Colombia, Juan Manuel Santos.
Desde el fallecimiento del líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez, en 2013, los ataques contra Venezuela se han acentuado. En 2015, el entonces presidente de EE. UU., Barack Obama, decretó al país suramericano como «una amenaza inusual y extraordinaria», acción que abrió las puertas a amenazas más serias como una invasión militar asomada el pasado año por Donald Trump.
La ultraderecha- respaldada por Washigton- ha insistido en socavar al gobierno venezolano, con planes que van desde el magnicidio -todos frustrados-, asesinatos selectivos, financiamiento de grupos violentos de calle – en 2014 y 2017-, así como saboteo económico y guerra de precios.
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