“Perdón, hermanos”, gritó a los indígenas, el papa Francisco en México, Chile y Perú al referirse al maltrato y la exclusión que han recibido.
Esto mismo lo hizo en Puerto Maldonado en Perú y en Chile pidiendo al pueblo Mapuche de no hacer vana su lucha por la justicia usando la violencia.
“Sus pueblos han sido incomprendidos y excluidos. Qué bien nos haría a todos (…) aprender a decir: ¡Perdón! El mundo de hoy, despojado por la cultura del descarte, los necesita”, dijo el Papa en el Estado de Chiapas donde se concentran cerca del 75 % de las comunidades indígenas en México. Allí, decretó el uso oficial de las lenguas indígenas en las misas.
Francisco está invitado a reparar y luchar contra las grandes injusticias que en siglos han condenado a los pueblos indígenas a ser parias, desplazados y marginados en su ‘propia casa’. La persecución de indígenas ha sido constante en varios países de la región debido principalmente al negocio de la explotación de sus tierras (ver Laudato Si’ no.93).
Francisco ha recordado en más de una ocasión que la sabiduría ancestral de los pueblos indígenas es, especialmente importante, en el cuidado de la Tierra y en la crisis ambiental que ha provocado el hombre ‘aparentemente civilizado’ que no respeta la Creación de Dios.
Aire limpio, agua y alimentos saludables no tienen valor y, sin embargo, la cultura extractiva y del descarte pone en el pedestal de la ambición a recursos como petróleo, oro, minerales varios, madera. Todo por encima de la vida y de quien la cuida: los indígenas. Un defensor de los derechos humanos comentaba en Colombia: un día beberemos agua con arsénico y comeremos carbón.
Otros pueblos esperan pérdon
El Papa Francisco no pedirá disculpa a los pueblos indígenas de Canadá por el sufrimiento de más de cien mil niños y jóvenes que además fueron separados de su familia y que fueron obligados a educarse en las escuelas residenciales de la nación.
Según el Catholic Register, Lionel Gendron, presidente de la Conferencia Episcopal del país norteamericano informó que luego de ser considerada la petición en un diálogo con los obispos de Canadá, la autoridad del Vaticano sintió que él personalmente no puede responder a la solicitud por ahora.
El Sínodo de los obispos
El Sínodo de los obispos sobre la región Panamazonía que se realizará en octubre de 2019 es una oportunidad de cambio de marcha. El Papa latinoamericano ha considerado importante unir esfuerzos para salvar una región que involucra a 8 países y donde viven alrededor de tres millones de indígenas, representando alrededor de 390 pueblos y nacionalidades distintas.
Así, se denuncian nuevos colonialismos “enmascarados de progreso”, tras 500 años después de la conquista, más o menos 400 años de misión y evangelización organizada, y 200 años después de la independencia de los países que configuran la Panamazonía.
En el documento preparatorio para el Sínodo 2019: Amazonia: nuevos caminos para la Iglesia por una ecología integral, difundido en junio, se afirma que el 75% de la población amazónica vive en la ciudad, desplazada de su tierra ancestral, o por la colonización cultural que hace que los jóvenes emigren casi por obligación.
Un porcentaje considerable de indígenas viven en la pobreza y en la marginación, por ende se cuentan entre las personas más pobres del planeta, pues el 15% de la población más vulnerable pertenece a esas comunidades.
“Es indispensable prestar especial atención a las comunidades aborígenes con sus tradiciones culturales. Los indígenas no son una simple minoría entre otras, sino que deben convertirse en los principales interlocutores, sobre todo a la hora de avanzar en grandes proyectos que afecten a sus espacios”dijo.
“En diversas partes del mundo, los indígenas son objeto de presiones para que abandonen sus tierras, a fin de dejarlas libres para proyectos extractivos y agropecuarios que no prestan atención a la degradación de la naturaleza y de la cultura”denunció.
“No olvidemos que la desaparición de una cultura puede ser tanto o más grave que la desaparición de una especie animal o vegetal. Y la única manera de que la cultura no se pierda es que se mantengan en dinamismo, en constante movimiento”, denunció.
“Sigan defendiendo a los pueblos en aislamiento, son los más vulnerables. Su presencia nos recuerda que no podemos seguir disponiendo de los bienes al ritmo de la avidez del consumo. Es necesario que existan límites que nos ayuden a preservarlos de todo intento de destrucción masiva de su hábitat”, señaló el Papa.
https://www.elciudadano.cl/memorias/el-papa-francisco-no-pedira-disculpas-a-indigenas-de-canada/04/03/