Gobierno pagará multa a concesionarios de cárceles

El Ministerio de Justicia deberá pagar 353 millones de pesos de multa al concesionario de la cárcel Santiago Uno


Autor: Mauricio Becerra

El Ministerio de Justicia deberá pagar 353 millones de pesos de multa al concesionario de la cárcel Santiago Uno. Los contratos autorizan este desembolso al fisco por la sobrepoblación del penal en el último semestre del 2008. Chile, en tanto, es el país con mayor porcentaje de población recluida en toda Latinoamérica y destina más recursos en mantener a chilenos presos que en educarlos, darles salud o trabajo. En el penal de Puerto Montt se paga sobre el medio millón de pesos por interno al mes.

El mundo al revés: ahora el Estado debe pagar multas a concesionarios privados. Y por enviar más gente a la cárcel de la presupuestada. Sin juicios, ni Consejo de Defensa del Estado ni chistar, el fisco debe pagar en marzo de este años 353 millones de pesos al grupo Vinci, dueños de la cárcel Santiago Uno.

Santiago Uno se construyó para albergar un máximo de 3.081 internos, cifra que fue superada en un 20%. Los contratos entre los privados y el fisco establecieron que por cada día que se sobrepase el límite, el Estado deberá pagar 100 UTM a los dueños. En 93 oportunidades se sobrepasó la capacidad durante el 2008.

Según explicó el subsecretario de Justicia, Jorge Frei, la sobrepoblación del penal se debió a la ampliación y remodelación de las cárceles de San Miguel y Colina, lo que obligó a trasladar reos a la cárcel privada.

Según información proporcionada por Gendarmería, al 30 de junio de 2008 los costos a pagar por interno en los penales privados superan en promedio los 300 mil pesos. Es decir, hoy el Estado chileno gasta más dinero en mantener a alguien preso que en lo que entrega por becas de estudio o de alimentación , subsidios familiares, a discapacitados o fondos de inversión social.

Y no es que los presos vivan en un palacio. Un familiar de un reo de Santiago Uno comentó a El Ciudadano que “tienen dos comidas al día, duermen en camas de cemento con una delgada colchoneta y les pasan 2 frazadas para que se abriguen”.

Otra situación que ha afectado la salud mental de los internos es que están segregados en celdas individuales a las que ingresan a las nueve de la noche en Santiago Uno o a las siete de la tarde en el penal de Rancagua. No tienen contacto con nadie hasta el otro día.

El capellán Luis Escobar, que atiende el penal de Rancagua, dijo ante una comisión investigadora de concesiones carcelarias de la Cámara de Diputados, sobre los suicidios ocurridos en dicha cárcel –que a agosto del 2008 sumaban los 10-  que “las cárceles concesionadas eliminaron la convivencia gregaria de los presos, por lo que la soledad es una gran carga psicológica”.

Entre el 2007 y 2008 aumentaron un 20% los reclusos en Chile (8.353 personas), aumentando de 42.033 internos a 50.386. De estos 11.609 son imputados (23%) y 38.777 (77%) los condenados. Es decir, un 0,3% de la población chilena está recluida. Por cada 100 mil habitantes Chile tiene 240 recluidos.

Las cárceles privadas proyectadas originalmente eran 10, para albergar a 16 mil internos. Fueron construidos los de Iquique, La Serena y Rancagua; ganada por un consorcio formado por Besalco, Sodexho y Torno Internazionale (Bas) a 20 años; en tanto que  Santiago I y Valdivia se entregó al grupo francés Vinci.
Los penales proyectados en Concepción y Rancagua fueron abandonados por las empresas concesionarias, lo que motivo una investigación de la Cámara de Diputados, en tanto que los proyectos Santiago II y Talca, aún no empiezan a ser construidas.
Al 30 de noviembre, 10.275 de internos se encontraban en cárceles concesionadas, un  18.9% del total. En el Complejo Penitenciario Alto Hospicio había 1.810 internos; en la cárcel de La Serena, 1.616; en Rancagua, 1.928; en Santiago 1, 2.936; en Valdivia, 1.019; y en Puerto Montt, 966 presos.

Lucía Damert, directora del Programa de Seguridad de FLACSO, considera que es “grave que se tengan que pagar multas onerosas, aún más cuando se justificó las cárceles privadas para evitar el hacinamiento y mejorar la calidad de vida de los presos”. A juicio de la investigadora esto da cuenta de “una falta de planificación”.

COSTOS POR PENAL DURANTE EL 2008

Los costos por internos en los complejos penitenciarios privados superan los 500 mil pesos mensuales, en el penal de Puerto Montt. El más barato son 170 mil pesos pagados por interno en Santiago Uno.

Estos costos incluyen los subsidios que se le cancelan a las Sociedades Concesionarias y los gastos directos en que incurre Gendarmería de Chile, como por ejemplo, las  remuneraciones del personal de vigilancia.

El detalle de los costos que debe pagar le fisco a los dueños de las cárceles por interno a junio del 2008 por penal, según la información entregada por Gendarmería es:

Complejo Penitenciario Alto Hospicio:

Costo Semestral:        $2.094.223.
Costo mensual:  $349.037.

Complejo Penitenciario La Serena:

Costo Semestral:        $2.291.055.
Costo Mensual:  $381.842.

Complejo Penitenciario Rancagua:

Costo Semestral:        $1.795.278.
Costo Mensual:  $299.213.

Centro de Detención Preventiva Santiago 1:
Costo Semestral:        $1.025.449.
Costo Mensual:  $170.908.

Complejo Penitenciario Valdivia:

Costo Semestral:        $2.855.321.
Costo Mensual:  $475.886.-

Complejo Penitenciario Puerto Montt:
Costo Semestral:        $3.237.648.
Costo Mensual:  $539.608.-


Mauricio Becerra R.
El Ciudadano


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