La falsa creencia «menos dañina» de los shishas y su sabor enmascarado

Las paredes de las arterias de los fumadores de las pipas de agua se endurecen trayendo como consecuencia la obstrucción del sistema sanguíneo y con ella problemas cardiovasculares, incluso la muerte

Charilin Romero

04/10/2018 12:47pm

Los fumadores de pipa de agua (shishas) creen que es menos perjudicial que los cigarrillos, asumiendo la falsa creencia de que el agua filtra el tabaco sin ser perjudicial. La Organización Mundial de la Salud en su portal web sostiene que no existen estudios que comprueben que esta práctica popular de Oriente Medio sea dañina.

«El sabor del tabaco enmascara el daño que ocasiona la nicotina», indicó a la BBC Mundo Mary Rezk-Hanna, profesora asistente de enfermería en la Universidad de California, en Los Ángeles (Estados Unidos) al programa Health Check.

La experta comentó que fumar tabaco usando una pipa entraña tiene sus riesgos adicionales. «Es la única forma de tabaco que utiliza la quema de carbón para la combustión, así que además de estar fumando el tabaco, se ingieren también partículas de carbón quemado, sin ningún tipo de filtro, directo a la boca», aseguró la investigadora.

Es la única forma de tabaco que utiliza la quema de carbón para la combustión

Entre los riesgos evidenciados en un estudio donde participaron jóvenes en edades de 18 y 34 años que no fumaban cigarrillos y que habían ingerido tabaco a través de la pipa de agua en una sola sesión, las conclusiones fueron que las paredes de las arterias de los participantes se habían endurecido.

«Esto es un problema serio porque con una arteria rígida y obstruidas el riesgo de muerte y de otras enfermedades cardiovasculares se multiplican«, comentó la investigadora Mary Rezk-Hanna, quien realizó un experimento para su universidad (UCLA).

Rezk-Hanna expresó que las sesiones con pipa de agua pueden prolongarse por horas, por lo que el número de inhalaciones es mucho mayor que con un cigarrillo.

Fumar pipas de agua podría generar cáncer de pulmón

El Centro para el Control y Prevención de enfermedades de Estados Unidos advierte que un cigarro estándar supone 30 inhalaciones, mientras que una sesión de shisha puede proporcionar hasta 200.

En cambio, un estudio de la Universidad estadounidense de Maryland precisó que una sesión de pipa de hasta una hora equivale a fumarse un paquete entero de cigarrillos.

Además, la Universidad de Pittsburgh reveló que el humo característico que generan estas pipas de agua conlleva sus riesgos, debido a que este penetra más en los pulmones, consiguiendo que éstos absorban, según sus cálculos, 25 veces más alquitrán, 2,5 veces más nicotina y 10 veces más monóxido de carbono que en un cigarrillo, donde parte del humo se pierde en la combustión del papel.

Origen de la shisha

El uso de estas pipas de agua se ha extendido a jóvenes de otras naciones volviéndose popular en los Estados Unidos y Europa, porque se usa con tabaco de sabores, lo que atrae a la población joven.

Entre las partes que conforman las pipas, están una cerámica, donde se coloca el tabaco con sabor; otra de metal, que conforma el cuerpo de la pipa y de donde salen tubos con boquillas para poder fumar y finalmente, la parte inferior es un recipiente, generalmente de cristal, que se llena de agua.

Las shishas están conformadas de tres partes

El aire se aspira mediante las boquillas, la presión negativa ayuda a calentar el carbón ya prendido que quema el tabaco y pasa en forma de humo a la parte inferior de la shisha, mientras se continúa inhalando el humo que circula a través del cuerpo de la pipa y los tubos que salen de ellas hacia la boca del fumador.

El humo que se genera es denso y el sabor que deja en la boca suele ser agradable porque es tabaco con aromas de frutas, vainilla o incluso alcohol. Y eso es lo que hace a mucha gente pensar que es menos perjudicial para la salud.