(Vídeo) Mujer abandona su perro en Medellín y este persigue el vehículo para hacerla reflexionar

La mujer dijo en primer lugar que era un can callejero y después cambió la versión a los policías asegurando que su amiga era la dueña

Charilin Romero

17/10/2018 2:28pm

Para qué tomas un animal de mascota si luego lo vas a abandonar, ¿tiene sentido darle amor y después echarlo cómo una basura, sin remordimiento alguno? No sabemos hasta dónde puede llegar y llevar a un ser humano a dejar en el olvido a su mejor amigo.

Este caso no será el primero, aunque no queremos dar clases de moralismo sería interesante sentarse a reflexionar sobre las acciones que se cometen y dibujar la vida como queremos que sea en el presente y no cómo nos venga el futuro. Ante estos hechos, tan crueles, las redes sociales se han convertido en una herramienta para denunciar y mostrar a los pobladores de lo qué son capaces de hacer.

Un caso de abandono animal se hace viral en la web 2.0 y esta vez lo dieron a conocer los internautas en Medellín, Colombia. En el vídeo se aprecia como un perro desesperado persigue a un taxi en el que su dueña huía sin piedad.

El perro no paró de correr por 20 cuadras, mientras que al unísono, la lluvia rodaba sobre su cuerpo azotándolo y llenándolo de frío, así como de soledad;anunciándole que su vida en familia había culminado y que su nueva etapa no sabría a dónde llegaría.

Él can solo quería abordar el vehículo de su mejor amiga para estar de nuevo con su “familia”; sin embargo, el taxi no se detuvo ni por un instante, parece que no lo conocían o al menos eso aparentaban. Pero, el perro con esperanza seguía intentando que se frenará el vehículo junto a su conductor y pasajero.

El animal logró que dos agentes policiales se acercaran al vehículo para preguntar sobre el perro que emocionado, brincaba hacia la ventanilla para que alguien lo reconociera, pero desdichadamente los resultados no fueron los esperados.

La mujer dijo que no era su dueña y que se trataba de un perro callejero; tal vez con un poco de desasosiego cambió la versión y confesó que se trataba del perro de una amiga, por lo que ella no podía hacerse responsable.

Aunque el perro no volvió a ese hogar. Pudo encontrar una nueva familia que lo adoptó y que fue testigo de la escena. Actualmente, el perro vive en una finca en Remedios, un municipio al noroeste de Medellín.