Después de conocerse el término transgénero empleado para denominar a las personas que no se identifican con su sexo de nacimiento, ahora nació un nuevo calificativo: trans-edad, para identificar a las personas que consideran que su edad no coincide con su identidad.
Esta es la historia de Joseph Roman de 38 años, quien en enero pasado fue acusado por la violación de tres niñas menores de edad ―dos de 6 años y una de 8― en Chicago, Estados Unidos, después de que los padres de una de ellas descubrieran lo que estaba ocurriendo.
El victimario confesó haber abusado de las niñas en repetidas ocasiones desde el 2015 e intentó justificar sus terribles acciones alegando que era una persona “trans-age” o trans-edad.
Además, exigió respeto y aceptación por ello, ya que “no lo podía evitar”: era un niño de 9 años en su “interior”.
Para los expertos, el término “trans-age’ o ‘trans-edad” está manchando los esfuerzos de la comunidad LGBTIQ+ para conseguir respeto en la sociedad contra la discriminación, estando cada día más cerca de lograr finalmente la equiparación y reconocimiento de los derechos de las personas a ser aceptados (legal y moralmente).
Es una persona transgénero aquella que siente que el sexo que se le “asignó” al nacer no coincide con su identidad de género o con el que siente que tiene en su interior, independientemente de su inclinación sexual.
El término trans–edad surgió a mediados del año 2015, cuando el colectivo LGTBIQ+ apoyó la historia de Paul, un hombre canadiense de 46 años que tenía siete hijos con su esposa, y una mujer con la que había estado casado durante 23 años.
Un día en el 2007 sentó a su familia en la mesa para decirles que quería ser transgénero; que había decidido cambiarse de sexo y asumir su «verdadera identidad»: una pequeña niña de 6 años.
https://www.elciudadano.cl/genero/lgbtiq-segun-informe-los-crimenes-esta-comunidad-aumentaron-10-paises/01/24/