Durante los últimos meses, los ciudadanos de Haití han realizado varias protestas para pedir la investigación de los responsables del desfalco los fondos sociales del Estado.

Un conjunto de organizaciones y grupos sociales de Haití convocaron para este domingo a una nueva protesta en las calles contra la corrupción y la impunidad, en la que exigirán respuestas por las presuntas irregularidades en el manejo por parte de las autoridades de los fondos de Petrocaribe.

Llamados a la calma

Ante este panorama, el Gobierno realizó un llamado a la calma y el diálogo a través de un mensaje emitido a todo el país por el primer ministro, Jean Henry Ceant, quien ratificó que la policía tiene instrucciones de garantizar la seguridad de la población durante la marcha.

El político haitiano instó «a todos a guardar la calma», con la intención de «mejorar la situación». Al tiempo que consideró que la protesta del pueblo «es algo bueno para la democracia».

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Durante los últimos meses, ciudadanos de Haití han realizado una serie de protestas para solicitar la investigación de los responsables del desfalco los fondos sociales del Estado.

Asimismo, las manifestaciones buscan solicitar a las autoridades mejores condiciones de vida, acceso a la salud y a la educación, en un país que posee un alto índice de pobreza.

Caso Petrocaribe

En el contexto de la cooperación internacional que se estableció en el año 2005 entre Venezuela y los países de la región caribeña, Haití resultó beneficiada. La idea era comerciar petróleo con una tasa de interés muy baja.

Con este convenio se buscaba fomentar la inversión educativa, social y de infraestructura. Los manifestantes exigen saber el destino de más de 2 millones de dólares producto de esta cooperación.

«Ese fondo debería ser utilizado para desarrollar proyectos sociales y de mejora de la situación del pueblo haitiano. Estamos hablando de casi 3.000 millones de dólares que fueron gastados por diversos gobiernos desde 2008 hasta 2016», explicó Pierre Negaud Dupenor, periodista y profesor de la Universidad Estatal.

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Para Dupenor, el principal problema de Haití es la fuerte debilidad de sus instituciones y la inestabilidad política, dos temas de vieja data.

Tras la renuncia de Jean-Bertrand Aristide en 2004, Haití está plagada de “misiones de establecimiento de la paz de Naciones Unidas. La situación general del país ha empeorado con la presencia de la Minustah”, dijo Dupenor a Sputnik.

Millones de haitianos dependen de la ayuda humanitaria tras los embates de los terremotos, huracanes y enfermedades como el cólera que han dejado numerosos fallecidos.

De acuerdo a investigaciones, miles de dólares provenientes del exterior han ido a parar en manos de contratistas, agencias tanto civiles como militares extranjeras.

Tal es el caso de la Fundación Clinton acusada en varias oportunidades de cometer crímenes financieros con los 30 millones de dólares recaudados para el fondo de recuperación de Haití.

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Claves de las protestas

Los manifestantes piden al Gobierno iniciar una investigación para enjuiciar a los responsables del despilfarro de los fondos sociales. En el mes de octubre las protestas dejaron el saldo de un fallecido y varios heridos, según reportes de la policía.

En julio pasado ocurrieron disturbios que se cobraron la vida de más de 20 personas. Los protestantes rechazaban el aumento en los precios de la gasolina, el petróleo y el kerosene. Esta medida fue acordada en febrero entre el Gobierno y el Fondo Monetario Internacional (FMI).

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